La reforma pensional radicada en el Congreso propone que quienes tengan ingresos de más de cuatro salarios mínimos tendrán a su cargo un aporte adicional, el cual pasaría de 1%, que es el actual, a 2% sobre el Ingreso Base de Cotización (IBC), que se destinará al Fondo de Solidaridad Pensional.
Así, si el aportante tendrá que dar el 2% de su IBC al fondo, es decir, unos $92.800; mientras que en el sistema actual su aporte es de 1%, $46.400.
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Una persona que devenga cuatro salarios mínimos al mes tendrá una cotización total de 18% (16% más el aporte de 2% al Fondo de Solidaridad), de la que 66,7% lo pagará el empleador y 33,3% el empleado.
A partir de los 16 salarios mínimos se hará un aporte adicional al 2% anterior, así: de 16 a 17 smlmv: 0,2% para quedar en 2,20%; de 17 a 18 smlmv: 0,4% a 2,40%; de 18 a 19 smlmv: 0,6% a 2,6%; de 19 a 20 smlmv: 0,8% a 2,80%, y superiores a 20 smlmv de 1% a 3%.
Para Camilo Cuervo Díaz, gobernador del Colegio de Abogados del Trabajo y la Seguridad Social de Colombia, esta no solo es una clara intención del Gobierno de querer gravar los altos salarios, sino que también es una forma “injusta de castigar a quienes trabajan o han trabajado por altos sueldos”.
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“Hay un tema de coherencia y de justicia porque no habría ningún problema en que yo pudiera, por ejemplo, cotizar hasta 45 smlmv siempre y cuando eso tuviera correspondencia directa en mi pensión, aquí el problema es que le dicen que usted podrá cotizar hasta 45 smlmv pero su pensión nunca va a poder superar 20 salarios mínimos, lo cual suena injusto, en especial si uno está en Colpensiones, porque el dinero de esta podría tener una naturaleza pública”.
Cuervo afirmó que están utilizando esa plata, no para generar pensión, no para mejorar la situación pensional de la gente que tiene altos ingresos, sino para subsidiar otras pensiones.
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“En conclusión, es un impuesto a las pensiones altas, es un impuesto adicional al que ya existió y que se intentó meter en la reforma tributaria y no pasó, pero aquí lo están volviendo a meter a través de teóricas de cotizaciones parafiscales dirigidas, eso sí, a pensiones, pero finalmente impuesto es impuesto, llegue de donde llegue”, apuntó Cuervo.
Así, y retomando el ejemplo, e ilustrado en cifras, si usted gana 18 salarios mínimos al mes, y de ser aprobada la reforma, su aporte al Fondo de Solidaridad sería de 2,40% de su IBC, es decir $501,120, mientras que con el sistema vigente (1,40%), usted da unos $292.320. Así, con la reforma de Petro tendría que aportar $208.800 más que lo que lo hace hoy.
Con la reforma propuesta, los pensionados que reciban una mesada de entre 10 y 20 mínimos contribuirán 2% al Fondo de Solidaridad. Y los que devenguen más de 20 smlmv contribuirán con 3%. Hoy esos montos son de 1% y 2% respectivamente.