A dos semanas de terminar el año y tal y como lo había anunciado el Gobierno Nacional, se reglamentó la Ley 2224 de 2022 mediante el decreto 2174 de 2023, con el cual quedó prohibida totalmente la fabricación, la manipulación y la comercialización de artículos pirotécnicos y fuegos artificiales que contengan fósforo blanco en el país.
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La normativa fue firmada por los ministros del Interior, Luis Fernando Velasco; Justicia, Néstor Osuna; de Salud, Guillermo Jaramillo y de Defensa, Iván Velázquez, con el fin de garantizar los derechos fundamentales a la vida, la integridad física, la salud y la recreación de los niños y jóvenes, así como de la ciudadanía en general en medio de las celebraciones de Navidad y Año Nuevo.
Los ministerios que firmaron el decreto, en articulación con el INS y la Dirección Nacional de Bomberos conformarán una ‘Mesa técnica para la prevención de riesgos asociados a la actividad pirotécnica’, con el fin de diseñar propuestas pedagógicas, estrategias y programas de cultura ciudadana, que promuevan el efectivo cambio de actitudes y comportamientos en el uso responsable de la pólvora.
Y es que, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salud (INS), a corte del 17 de diciembre, el país registró 396 quemados con pólvora, 59 lesionados más que el año anterior.
De estos, 136 son menores de edad, de los cuales, 8 sufrieron quemaduras mientras se encontraban en compañía de un adulto que estaba bajo los efectos del alcohol.
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En este sentido, el decreto precisa que está totalmente prohibido que cualquier menor de edad y que personas en estado de embriaguez o bajo el efecto de sustancias psicoactivas, fabriquen, manipulen y comercialicen pólvora.
“De encontrarse un niño, niña o adolescente usando, manipulando, transportando, comprando o vendiendo pólvora, artículos pirotécnicos, fuegos artificiales o globos aerostáticos de pirotecnia, le será incautado el producto y será conducido y, puesto a disposición de un defensor de familia, o de la autoridad que haga sus veces, quien determinará las medidas de protección a adoptar, (…)”, indica el decreto.
Asimismo, la normativa contempla la exigencia de que las alcaldías deben otorgar un permiso previo para demostraciones públicas y privadas de pólvora y de artículos pirotécnicos o fuegos artificiales de categoría tres, precisando que, las multas económicas a quienes infrinjan la norma estarán por el orden de los $230 millones.
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La norma en Cúcuta
Aunque el nuevo decreto rige para todo el país, en la capital nortesantandereana también se encuentran activas algunas normativas que prohíben el uso, manipulación, fabricación, quema, almacenamiento, venta, distribución y transporte de pólvora, fuegos artificiales, explosivos y detonantes en el área urbana y rural del municipio.
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Los decretos exceptúan de esta medida solo a quienes adelanten espectáculos pirotécnicos para demostraciones públicas y/o especiales de interés general, pero que sea realizado por personal técnico idóneo para adelantar el proceso, destacando que primero deben solicitar un permiso a la Secretaría de Gobierno.
Asimismo, están prohibidas las ventas ambulantes de pólvora y la manipulación, porte y uso de elementos pirotécnicos donde se involucre o comprometa el bienestar de la población animal.
Sin embargo, recientemente La Opinión pudo constatar que en el centro de Cúcuta, la pólvora se está vendiendo sin ningún tipo de control, pues hay varios puestos informales con diferentes elementos pirotécnicos comercializados al por mayor y detal, situación que fue puesta en conocimiento de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc).
En este sentido, las autoridades informaron que durante lo corrido del mes de diciembre, se han incautado más de 1.900 unidades de artículos de diferentes tipos de fuegos pirotécnicos los cuales no contaban con las normas mínimas para el almacenamiento, manipulación y distribución por lo que se procedió a la aplicación del Código Nacional de Policía y Convivencia, multando a quienes se les encontró este material.
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La coronel Sandra Yaneth Mora, comandante de la Mecuc, hizo un llamado a la comunidad en general para que no sean indiferente frente al riesgo que representa la pólvora, y, en caso de conocer sobre la existencia de fábricas clandestinas, centros de expendio y/o almacenamiento de estos elementos, se comuniquen oportunamente con las autoridades a través de la línea directa 123 o al número de celular del cuadrante.
Quemados en Norte
En Norte de Santander, según el reporte del INS, hasta la fecha se han registrado 12 quemados con pólvora, 5 más que en el mismo periodo del año pasado.
De estos, 4 son menores de edad y un adulto que se lesionó estando bajo los efectos del alcohol.
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El balance señala que 8 de las personas afectadas se quemaron mientras manipulaban totes, voladores, luces de bengala y volcanes, precisando que dos de estos han sufrido amputaciones de sus dedos.
Los otros lesionados sufrieron quemaduras mientras observaban la quema de estos elementos.
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