La lucha contra la inseguridad supone una carrera contra reloj en la ciudad de Cúcuta donde, como parte del plan de seguridad Libertad y Orden,  ya está listo el primer contingente de jóvenes que van a prestar el servicio militar, impulsado por el gobierno municipal. 

Esta semana se dio el ingreso formal de 222 jóvenes, mujeres y hombres, entre los 18 y 24 años de edad, que van a cumplir el período de entrenamiento y capacitación por espacio de tres meses, para luego salir a las calles de la ciudad, como garantes del orden y la seguridad. Esto será aproximadamente en el mes de mayo. 

Diego Villamizar, director de la Secretaría de Seguridad de la Alcaldía, explicó que de este primer grupo, 150 muchachos saldrán como policías auxiliares, mientras que los 72 restantes irán al Ejército como soldados rasos. 

 “La estrategia con estos jóvenes es que, acompañados de policías y militares profesionales, empecemos a tener mayor presencia en los diferentes barrios de Cúcuta, específicamente en parques, escuelas, universidades, centros comerciales”, explicó el funcionario. 

Hay que recordar que este grupo de jóvenes recibirá como incentivo a su disposición de servicio un bono único de dos millones de pesos, que será pagado por la administración municipal en el transcurso de su permanencia como funcionario de seguridad; asimismo, recibirán otras prebendas que les permitirá salir con opciones de trabajo tras el cumplimiento del servicio.  

Este modelo de servicio militar se mantendrá vigente al menos durante los cuatro años de la administración actual, según indicaron los responsables, quienes han destacado la acogida que ha tenido el programa en la juventud cucuteña. 

Otros de los incentivos que contempla este programa especial es la entregar de licencia de conducción, un curso de seguridad o escolta, validación del bachillerato, y la posibilidad de aprender otro idioma. 

Con el aumento del pie de fuerza en los principales cuerpos de seguridad de la entidad, más la consolidación de capacidades de la Fiscalía, Dijin, Sijin y del CTI, es lo que le va a permitir a la administración municipal entregar resultados efectivos contra la delincuencia, que apunta inicialmente a desarticular las bandas más conocidas como Tren de Aragua y AK-47, responsables del grueso de delitos que se registran en la entidad.
 

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Iniciativas similares

Luego de que el servicio militar dejara de ser obligatorio en Colombia, la llegada voluntaria de jóvenes a cumplir este deber se ha puesto cuesta arriba, por lo que gobiernos locales, ante los crecientes índices de inseguridad, han desarrollado iniciativas para motivar la población juvenil. 

Así, además de Cúcuta, también destaca la oferta de un millón de pesos hecha por el gobernador de Santander, el general en retiro, Juvenal Díaz Mateus, quien al lanzar su propuesta el pasado mes de enero, cuestionó el hecho de tener que buscar este tipo de estrategias para lograr el cumplimiento del servicio militar, frente a los 580 mil pesos que paga el estado.
 
Díaz Mateus lamentó, en ese momento, que se le pagara más a un joven para que dejara de delinquir, que a otro que estaba siendo llamado a servir a la patria, comentario que lanzó a propósito del programa Jóvenes en Paz.
  
Mientras que en Cali está la propuesta de pagar un salario mínimo completo a los jóvenes que presten el servicio militar, sin embargo, se espera que sea evaluada y aprobada por el alcalde Alejandro Eder, o por la gobernadora Dilian Francisca Toro. 

Actualmente en Colombia, existen más de 80 mil jóvenes activos en la prestación del servicio militar, de los cuales 70.583 están en el Ejército Nacional, 9.319 en la Armada y 2.897 en la Fuerza Aérea. 

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¿Cómo va el plan Libertad y Orden?

A la par de los planes y estrategias que se desarrollan desde la administración municipal, del ensayo y el error, van las constantes demandas de los ciudadanos de a pie, que se ven obligados a limitar sus movimientos por la ciudad, debido al constante acecho del fantasma de la inseguridad. 

En este sentido, las autoridades locales esperan lograr resultados contundentes para el cierre de los primeros 100 días de gestión. 

Al respecto, el director de seguridad de la alcaldía aseguró que van por buen camino. Aunque no precisó números, Diego Villamizar sostuvo que los indicadores de seguridad han mejorado sustancialmente, destacado la disminución de delitos en enero 2024 respecto a diciembre 2023, y mucho más respecto a enero de hace un año atrás. 

No obstante, el funcionario no ve oportuno hablar de cifras aún, sobre todo porque aunque la estadística es la herramienta para medir hechos concretos “sabemos que la realidad todavía supera la estadística, y que aunque digamos que el índice de delitos se redujo en determinado porcentaje, justo en ese mismo momento un cucuteño puede estar siendo víctima de un delito”, dijo. 

Más que números, desde el gobierno municipal procuran que haya una plena sensación de seguridad entre los habitantes de la ciudad y que, como lo ha reiterado muchas veces Jorge Acevedo, sean los delincuentes los que se sientan inseguros de salir a las calles, sólo que la tarea todavía está en fase inicial. 

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Cooperación binacional 

Como parte de las acciones necesarias para ‘limpiar’ la capital nortesantanderana aparece la cooperación con Venezuela, tal como se anunció en una primera reunión de trabajo común que hicieron a principios de febrero los gobernadores William Villamizar, por el departamento, y Freddy  Bernal, del vecino estado Táchira. 

Entre las estrategias propuestas destaca la necesidad de hacer un cruce de las bases de datos que poseen los cuerpos de seguridad sobre criminales reseñados a cada lado de la frontera. Al respecto, aseguró Villamizar que se está a la espera de una firma de protocolos entre ambos países, para establecer los canales de comunicación y coordinación de acciones conjuntas que permitan hacer frente a las bandas criminales que operan a lo largo del cordón fronterizo entre Colombia y Venezuela.