La audiencia pública que la Asamblea convocó para conocer de boca de los dos directores territoriales del Instituto Nacional de Vías los planes de inversión vial que se tienen en marcha en el departamento y las proyecciones que se manejan para la próxima vigencia terminó siendo un debate enfocado en la emergencia de la vía Ocaña-Cúcuta, cerrada hace más de cuatro meses por la avalancha del pasado 31 de mayo.
Según el cuestionario de 23 preguntas que respondió a la duma departamental el director territorial Invías de Norte de Santander, Leonel Valero, la habilitación del paso estaba programada para ayer, sin embargo esto no fue oficializado por la dirección central de la entidad en Bogotá.
También mencionó la inversión que ha hecho el Gobierno Nacional tratando de dar una solución a la transitabilidad en dicha vía, concluyendo que para atender la emergencia de El Tarrita se suscribió un contrato derivado de la urgencia manifiesta que se declaró por la avalancha por valor de 16.699 millones de pesos y una interventoría por valor de 1.799 millones de pesos.
Valero dijo que para poder tener una inversión sobresaliente y mejorar el paso por El Tarrita se necesitaría una inversión para la próxima vigencia superior a los 180.000 millones de pesos, que nos pueda garantizar una transitabilidad segura en ese corredor.
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El primero en intervenir en la audiencia fue el diputado Juan Carlos García-Herreros, quien lamentó que haya pasado tanto tiempo sin que el Invías haya podido dar paso en la mencionada vía.
“Esto no tiene precedentes en la historia del departamento y, lo peor, con tendencia a agravarse. Hay riesgo de que se vaya la banca en el sitio de la Curva y el Alto del Pozo”, dijo.
Añadió que esto es dramático para la economía del departamento “el estar al frente de un Gobierno Nacional incapaz para dar respuestas efectivas a las regiones”.
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Ramón José Cabrales, por su parte, indicó que la preocupación de la vía Ocaña-Cúcuta no es de este año. Ya en 2022 enviamos un oficio al ministro de trasporte de la época, Guillermo Reyes, ahí expresamos las preocupaciones porque la vía no se atiende. “Llevamos más de 3 años viendo los puentes hechos nada, láminas desprendidas y nadie responde”, dijo.
La diputada Milena del Socorro Calderón en su intervención mencionó que la economía de Ocaña y Cúcuta está golpeada de muerte. Invitó a unir esfuerzos para hacer un llamado al Gobierno Nacional para que mire a Norte de Santander con más prioridad. De aquí las cifras de violencia son alarmantes, y producto de ello necesitamos con urgencia inversiones sobresalientes, añadió.
El diputado Pedro Leyva indicó que la situación es muy compleja. Desborda la capacidad de las territoriales del Invías y del presupuesto asignado.
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“Nos dijeron que abriendo la frontera íbamos a recuperar el dinamismo económico del departamento, pero fue mentira. Sin lugar a dudas el área metropolitana tiene que mirar hacia Ocaña, que es la ruta para llegar a la ruta del sol y de los puertos del Caribe”, dijo el diputado.
Lo de Ocaña es terrible y complejo, está desbordada la crisis. El gobierno Nacional debe mirar con seriedad a Norte de Santander, concluyó.
A su turno, Rafael Cáceres llamó la atención a las bancadas parlamentarias de Norte de Santander para que se le exija al Gobierno Nacional una solución definitiva.
Las lluvias, ayer, habían impedido habilitar el paso en El Tarrita.
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