El capitalino, pese a no estar en cancha, fue uno de los líderes del camerino por su experiencia.
“El cariño que me tiene el plantel es porque vieron como un jugador de mi edad se trabajaba y entrenaba. No es fácil, pero con trabajo y profesionalismo se logran grandes cosas. Todos esos aspectos los puse al servicio del club, del Cúcuta. La mayor cantidad de partidos estuve fuera, pero era de los primeros en llegar, desde allí mis compañeros sintieron ese cariño”, resaltó el jugador que lució el dorsal 8.
Sobre que le dejó su paso por el cuadro representativo de Norte de Santander, declaró que fue un año de resiliencia.
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“Resiliencia es una palabra que saqué a flote. No estaba acostumbrado a vivir lo que viví aquí. En el fútbol me faltaba esto y mi Dios lo lleva a uno por los caminos que uno debe transitar. Aprendí demasiado, a estar en otras posiciones. Me ha llenado de felicidad, alegría, sabiduría porque el fútbol no es solo un deporte, te enseña muchas cosas”, expresó el mediocampista que pudo actuar en más de 640 partidos en toda su carrera.
En la final de ida del Torneo II-2023, que el Cúcuta Deportivo ganó 1-0 ante Fortaleza, Motta fue aplaudido por los miles de hinchas motilones tras un reconocimiento hecho por el club.