Por las fuertes lluvias presentadas durante las últimas semanas, un movimiento en masa dejó afectadas las viviendas de más de 60 familias radicadas en los asentamientos humanos de Nueva Ilusión y Alfonso Gómez, quienes han venido reportando los daños.

“Las fallas son de dos metros de profundidad y, aparte de ello, se están quebrando por completo, tanto en los lotes como en las casas construidas con materiales no convencionales”, declaró Huber Plaza, secretario de Gestión del Riesgo de Desastres.

Por ser zona de alto riesgo, el jefe de despacho indicó que están verificando las evaluaciones de daños y análisis de las necesidades para coordinar un plan de acción en el que se pueda ayudar a las familias a evacuar la zona y evitar un hecho lamentable.

Como parte de una solución temporal a la emergencia, la semana pasada, durante una visita a la comunidad para inspeccionar las fallas, se entregaron 79 kits de ayuda humanitaria con alimentos e implementos de cocina y aseo.

William Balaguera, presidente de la Junta de Acción Comunal del asentamiento, agradeció la contribución a su comunidad y el compromiso asumido con la emergencia.

“Se les notificó que aquí no pueden estar. Haremos visitas constantes y monitoreo con todos los miembros municipales”, enfatizó Plaza.