Según sondeo de la firma Edelman, dada a conocer en diferentes medios, como Portafolio (jueves 15), ante la difícil situación económica como fruto de la pandemia y las expectativas del futuro, los colombianos muestran mayor confianza en las empresas que en la autoridad gubernamental. Por esto esperan que los directores ejecutivos o CEOs (por sus siglas en inglés), llenen el vacío del gobierno y utilicen su liderazgo para solucionar los principales temas que amenazan al país.
De acuerdo a la encuesta de Edelman, el 68 por ciento de los colombianos cree que los directores ejecutivos deben intervenir cuando el gobierno no solucione los problemas del país, mientras el 67 por ciento considera que los líderes empresariales deberían tener la iniciativa en los cambios sin esperar que el gobierno los imponga.
Esto refleja la credibilidad de los colombianos en el sector corporativo, en el país el nivel de confianza en los empresarios es del 63 por ciento, por encima del promedio mundial (61%). Esta confianza también se refleja en la relación directa de los trabajadores colombianos con los empleadores (82%).
Con base en este nivel considerable de confianza en los empresarios, de acuerdo a este análisis, el 93 por ciento de los colombianos quieren que los directores ejecutivos se pronuncien públicamente sobre desafíos tales como la pandemia (66%), la automatización del trabajo (64%) y asuntos sociales (54%).
El sondeo destaca que con base en este nivel de confianza los colombianos quieren que los empresarios tomen acción en mantener a los empleados y clientes seguros, capaciten a sus trabajadores, avancen en la diversidad y equidad y mejoren su comunicación.
Pero la confianza en el sector público está a otro nivel pues según la encuesta la confianza en el gobierno apenas llega al 33 por ciento, muy por debajo del promedio mundial (53%) y los líderes públicos 24 por ciento.
Según la última edición de “Trust Barometer2021 de Edelman”, el 44 por ciento de los colombianos quiere trabajar desde la casa y el 66 por ciento prefiere volver a la oficina.