Los informes de la vacunación contra el coronavirus a nivel mundial atraen la atención tanto por las estrategias aplicadas por los países como por los logros obtenidos. Por ejemplo, en Israel prácticamente el total de la población ha sido vacunada y en Estados Unidos el presidente Joe Biden celebró el miércoles 24 que en apenas 5 semanas se han puesto 50 millones de vacunas.                                

Hasta hace una semana el 75 por ciento de las vacunas estaban concentradas en 10 países mientras 130 países aun no tenían acceso a este prioritario servicio, calificado por la Organización Mundial de la salud (OMS) como un bien público mundial.

Con excepción de Islandia, donde la atención prioritaria de la vacunación fue para los jóvenes y Venezuela donde el presidente Maduro escogió a los diputados chavistas y a los militares, los profesionales de la salud y los adultos mayores han sido el foco de atención en este proceso de vacunación a nivel mundial.

Y en el manejo irregular de esta poderosa arma contra el coronavirus, en Argentina el presidente Alberto Fernández le exigió la carta de renuncia al ministro de Salud tras conocerse la vacunación irregular de funcionarios y otras personalidades próximos al gobierno sin seguir los protocolos exigidos a la población en general.

En Colombia, pese a que saltarse el orden para recibir la primera dosis de la vacuna contra el coronavirus podría traer sanciones millonarias y hasta cárcel por cinco años para quienes los hagan, 16 vacunas son buscadas tras su posible desvío.

Pero lo que más atrae la atención en estos momentos son las buenas noticias sobre la alta reducción a nivel mundial del número de contagios diarios y de muertes de la COVID-19 en lo que va corrido de 2021. Esta reducción coincide con la llegada de la vacuna a Colombia el pasado 17 de febrero.

Estas buenas noticias generarán indudablemente avances positivos en la recuperación económica.

Así sea.