La llegada de las primeras dosis de la vacuna para combatir el Covid-19 terminó por convertirse en lo que muchos han calificado como un ‘show mediático’, donde han prevalecido las fotos con la llegada del cargamento al aeropuerto de Bogotá y, posteriormente, a cada uno de los municipios y ciudades donde ya se empezaron a aplicar.
Las 50.000 vacunas que llegaron al país el pasado lunes, en un avión de DHL desde Europa, desencadenaron una serie de actos, que a la luz de la emergencia tan difícil que ha tenido que vivir el país en el último año, seguramente se hubieran podido obviar o manejar de una manera diferente para darle mayor celeridad a la implementación del plan de vacunación que organizó el Gobierno Nacional.
Por lo menos así lo considera el analista Luis Estrada, que señala que si bien el Gobierno Nacional debe velar para que se vea la transparencia de todo el proceso, si se ha exagerado en muchos de los eventos y acciones que se dieron luego de la llegada del primer cargamento en la tarde del lunes.
“El mayor protagonismo que debe tener el presidente Iván Duque, los ministros, alcaldes y gobernadores, es garantizar que a la par que vayan llegando las vacunas y se distribuyan, las mismas sean a quienes corresponde y no que se den hechos de favoritismo, como se vio en el escándalo del Perú”, resalta el experto.
También considera que el reto que tiene el Gobierno Nacional, de aplicar la vacuna a más de 35 millones de personas durante este año, es “muy grande”, por lo que debe concentrarse en lo que realmente es importante, que es el cumplimiento del Plan Nacional de Vacunación, que tanto ha defendido en las últimas semanas.
El show de las vacunas
Aunque el presidente Iván Duque, en diversas oportunidades, pidió no politizar el plan nacional de vacunación contra el Covid-19, fue el mismo quien, el lunes en la tarde, al recibir el cargamento en el aeropuerto El Dorado, abrió el denominado ‘Show de las vacunas’.
Después de una declaración transmitida en directo por la mayoría de medios, el mandatario colombiano posó para una selfie con la vicepresidente, Marta Lucía Ramírez; el ministro de Salud, Fernando Ruiz, la jefe de gabinete, María Paula Correa; y el director del Dapre, Víctor Muñoz, haciendo un gesto de victoria con las manos y la cual fue bastante criticada en las redes sociales.
El miércoles, cuando la primera vacuna se iba a aplicar en el Hospital Universitario de Sincelejo, llamó la atención el amplió despliegue de seguridad que se le dio al transporte de la misma desde el aeropuerto hasta el hospital, la cual estuvo acompañada de una caravana de varios carros de Policía y Ejército, transmitida en directo por varios medios de comunicación.
Luego, cerca de las 9:00 de la mañana, en el Canal Institucional y las redes de la Presidencia, como también en los canales privados de televisión, se transmitió en directo el momento en que se iba a inyectar a la enfermera jefe Verónica Machado. Un momento que estuvo acompañado de aplausos y abrazos por el presidente Duque, la vicepresidente Ramírez y el ministro de Salud en vivo para el país.
Pero no ha sido solo desde el Gobierno Nacional donde se han dado los excesos. Unos minutos antes, en el mismo centro hospitalario, se filmó al gobernador de Sucre, Héctor Espinosa, corriendo con la caja de vacunas en sus manos, para posar a las cámaras, pero ante la ausencia del alcalde de Sincelejo, Andrés Gómez, tuvo que repetir la escena hasta que este último apareciera llegara en la foto.
En Montería, el gobernador de Córdoba, Orlando Benítez, recogió el medicamento en la propia pista del Aeropuerto Los Garzones, en donde se le vio cargando la respectiva caja. Pero Benítez no sólo fue foco por eso, también porque respondió de forma airada a la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, quien había dicho que haber escogido a Sincelejo y Montería, correspondía a un afán político del presidente.
Pero de nada valieron las advertencias de Duque para que no fuera politizado ese momento. Tras la vacunación a la enfermera Machado, quien se colocó su mano en el pecho en el momento de la inoculación, esa imagen fue utilizada por seguidores del Centro Democrático, para relacionarla con el logo del partido, en donde aparece el expresidente Álvaro Uribe haciendo la misma expresión.
'El pantallazo'
Fue el jueves cuando el afán por estar en la aplicación de la primera vacuna estuvo más agitado. Ese día el turno le correspondió a las grandes capitales. En Bogotá, por ejemplo, la primer vacuna -que no fue la primera en realidad- fue para dos médicos y una enfermera en el Hospital de Kennedy, a donde llegó la vicepresidente Ramírez y el ministro Ruiz, pero la alcaldesa Claudia López no llegó.
El hecho suscitó ácidos comentarios de parte del ministro de la Salud, quien al momento de señalar que procediera con la vacunación, saludó a López, de quien dijo que “al parecer está conectada” por una llamada. A diferencia del día anterior, vicepresidenta y ministro no posaron para la selfie, sino que estuvieron atentos a mirar el momento y aparecer discretamente en el foto.
A la misma hora, en Medellín, el alcalde Daniel Quintero, para muchos rebosó la copa del protagonismo. Al momento en que imponían la vacuna a la enfermera del Hospital General de Medellín, Alba Rocío Montoya, el mandatario local la tomó de la mano y la abrazó.
Y como si fuera poco, el alcalde de Facatativá (Cundinamarca), Guillermo Aldana, aprovechó que su profesión es médico para colocar la primera vacuna a una enfermera del hospital local, claro que con todo el protocolo de bioseguridad.
Pero no todo paró allí, en Cali, por la supuesta demora del ministro de Justicia, Wilson Ruiz, en llegar a la ciudad, se tuvo que correr unas horas la aplicación, esto porque el funcionario era el delegado del Gobierno Nacional.
Ese día, el alcalde Jorge Iván Ospina trinó: “Las vacunas efectivamente tienen impacto capital para intervenir la pandemia del covid, pero no podemos bajar la guardia en medidas de bioseguridad y quiero que pase ya el excesivo “Show” para dedicarnos a lo fundamental. Me gusta la idea de proceder con celeridad”.
Ante estos protagonismos, las diversas asociaciones médicas hicieron el llamado a las autoridades para que se emprenda con el plan de inyectar el medicamento a quienes están en ese primer grupo y dejar de lado las fotos y los discursos.