Todo estaba listo para que la Fiscalía acusara al exdiputado Nicolás Petro ante el Juzgado Segundo de Conocimiento de Barranquilla, pero la audiencia tuvo que aplazarse por una solicitud del hijo del Presidente.

El fiscal Mario Burgos iba a llamar a juicio a Petro, pero el defensor, de quien antes era una ficha del Pacto Histórico en la Costa, planteó un conflicto de competencia. Es decir, presentó un recurso alegando que el juzgado barranquillero no debía llevar el proceso.

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El argumento principal del abogado de Petro es que los hechos investigados ocurrieron en varios lugares del país, no solo en la capital del Atlántico, pues también se habla de reuniones o gastos en Bogotá.

Sin peso jurídico para la Fiscalía

“Estamos ante unos hechos que deben ser juzgados en la ciudad de Bogotá”, expresó Sebastián García, representante suplente del exdiputado del Atlántico, en las instalaciones del Juzgado Segundo. Para la Fiscalía, sin embargo, se trata de una maniobra dilatoria presentada a través de una solicitud “superflua” sin una debida argumentación. El fiscal Burgos, presente en los juzgados de Barranquilla, dijo que la petición no tenía peso jurídico.

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Además, aseguró que la mayoría de los hechos que sustentan el incremento presuntamente injustificado del patrimonio de Petro y de su exesposa, Day Vásquez, ocurrió en Barranquilla.

“Según la ley, en caso de que la investigación arroje que los delitos se cometieron en varios lugares, la Fiscalía tiene la potestad de realizar la acusación en donde ella crea pertinente”, apuntó la delegada de la Procuraduría en el caso. El juez, por su parte, afirmó que, como se trata de “dos distritos judiciales diferentes”, el conflicto de competencias debe resolverse en la Corte Suprema de Justicia.

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El fiscal Burgos, no obstante, señaló que la solicitud debió rechazarse de tajo por parte del juez. Además, da por hecho que, una vez el alto tribunal determine qué pasará después, el proceso volverá al despacho del juez segundo de Barranquilla.

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