En máxima alerta se encuentran los organismos de socorro para mitigar los efectos de la primera temporada de lluvias del 2021, que ya produjeron estragos en el Catatumbo con fuertes inundaciones en extensas zonas de cultivos de pan coger.
La Gobernación a través de la Consejería Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres instó a las alcaldías a estar activas frente a la ola invernal y a disponer de los planes de contingencia y medidas de prevención durante la Semana Santa.
La zona del departamento hasta ahora más afectada es el Catatumbo, donde el desbordamiento de las aguas de varios ríos provocaron graves inundaciones en caseríos y extensas zonas rurales de Tibú.
Asimismo se presentan deslizamientos de tierra sobre vías que conectan a Sardinata con Las Mercedes y a Toledo con San Bernardo del Bata, lo que ha imposibilitado la normal movilidad del transporte de carga y pasajeros.
La comunidad le exigió a la alcaldía de Sardinata el mantenimiento de la vía, la cual se mantiene cubierta de lodo y piedras. Ayer, los mismos volqueteros eran los que cumplían esta labor.
De acuerdo con los pronósticos, se espera una condición de lluvias por encima del promedio para finales del mes de marzo y cercana a la normalidad en abril y mayo.
Asimismo, se prevén importantes volúmenes de precipitación en los departamentos andinos y en sectores de las regiones pacífica y amazónica, esto como consecuencia directa del Fenómeno de ‘La Niña’ el cual se mantendrá hasta mitad de año, según el IDEAM..
Para esta Semana Santa se pronostican lluvias intensas durante las tardes y noches, con alta probabilidad de actividad eléctrica en momentos de aguaceros intensos.
Lugares más críticos
Hasta el momento se reportan emergencias por la temporada de lluvias en un 15% de los municipios del departamento, principalmente por deslizamientos de tierra y crecientes súbitas de los afluentes. Los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo de Desastres se encuentran activos con los miembros operativos del sistema para adelantar las visitas de verificación técnica correspondientes a cada alerta generada en sus territorios.
Los reportes generados son del municipio de Pamplonita donde se reventó una guaya del Puente Hamaca afectando el paso de 20 familias; Durania, afectación de malla vial por deslizamientos de tierra; Ragonvalia: se presentó creciente de la quebrada Agua Blanca, sector Villa Calidad, y en el municipio de El Zulia existe dificultad en el tráfico vehicular en la vía de la zona cafetera de la vereda El Salto.
En la región del Catatumbo se reporta el aumento del caudal de los ríos Tibú, Nuevo y Sardinata en el sitio denominado como Tres Bocas donde se declaró la alerta amarilla por las fuertes inundaciones que afectan a decenas de viviendas ribereñas.
Los funcionarios de la Oficina de Gestión del Riesgo de esa población aseguran que es un fenómeno de tipo recurrente, ya que la zona es naturalmente anegable y la comunidad cuenta con las medidas necesarias para evitar pérdidas materiales.
Se prevé desbordamientos, por lo que las autoridades locales, organismos de socorro y miembros del sistema de riesgos ya se encuentran en máxima alerta para brindar la atención inmediata, pues los ríos Tibú y Sardinata no han recuperado su cauce normal.
El municipio de Santiago también reporta pérdida de banca en el sector Las Lajas, vía que conduce a la vereda Cuperena de La Salada. Igualmente se informa sobre la avería en los tubos que transportan agua de la bocatoma para el suministro del centro poblado, a la altura del Idema.
Entre Sardinata y la Ye de Astilleros, a la entrada de San Roque, el paso por la vía se vio afectado por deslizamientos de tierra ocasionados por las lluvias.
En esta zona el INVÍAS hizo presencia habilitando el paso de manera oportuna. Hasta el momento no se han reportado eventos significativos de pérdidas materiales o humanas en el departamento.
Sin embargo, desde la Gobernación se articulan acciones ante la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, UNGRD, para mitigar los efectos de la ola invernal.