La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Ocaña
‘Silbando Marías’ para no olvidar a las víctimas del Catatumbo
El teatro para restituir el tejido social.
Authored by
Image
Javier Sarabia Ascanio
Javier Sarabia
Categoría nota
Viernes, 4 de Noviembre de 2022

En medio de un panorama de muerte y desolación, producto del conflicto armado enquistado en la zona del Catatumbo, surge una estrategia cultural para restituir el tejido social a través del grupo de teatro estable La Mueca, de la universidad Francisco de Paula Santander, seccional Ocaña.


Si quieres tener acceso ilimitado a toda la información de La Opinión, apóyanos haciendo clic aquí: http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion


Bajo la dirección de la poetisa Bexy Amparo Mendoza Cuadros, los estudiantes llevan a las tablas aquellos testimonios desgarradores de las personas que viven en carne propia la confrontación fratricida para no repetir la historia.
 
‘Silbando Marías’ es una pieza trágica escrita por el dramaturgo ocañero Juan Carlos Manzano Carrascal con el propósito de visibilizar la cruda realidad y crear conciencia a través del arte, sobre la importancia de la reconciliación y la convivencia pacífica de los pueblos.
 
“Es una historia real, basada en el testimonio de la señora María, una desplazada por la violencia de la zona del Catatumbo, que narra el drama que le tocó vivir en los enfrentamientos y el fuego cruzado de los grupos al margen de la ley. En su desplazamiento, que duró ocho días por la selva, murió su nieta y la tuvo que enterrar en la hojarasca del jardín de una casa abandonada”, manifiesta el escritor.
 
En un contexto social se visibilizan las manifestaciones de una cruenta guerra que nunca escogieron y padecen en una región que se debate entre la vida y la muerte, agrega el dramaturgo.
 

Lea además: Artes y letras para la restitución del tejido social en el Catatumbo

Asegura que la creación colectiva de esas vivencias corresponde al reflejo de los episodios dolorosos que viven miles de familias en todo el territorio colombiano. “Falsos positivos, desapariciones forzadas, cuerpos descuartizados con motosierras en una guerra sin sentido entre un valle de lágrimas. El arte es sanador en todos los aspectos y el teatro busca resarcir esas penas tejiendo los hilos del cambio a través de una actitud diferente frente a la vida”, agrega.  Manzano considera que esos vejámenes no se pueden repetir y las expresiones dramáticas deben servir de catarsis para una sociedad.  

El grupo de teatro La Mueca de la universidad Francisco de Paula Santander, seccional Ocaña busca resarcir el tejido social a través de las artes dramáticas.
Los rostros del dolor 

‘La Mueca’ ocupó el primer lugar durante el festival regional universitario desarrollado en la ciudad de Villavicencio, Meta y posteriormente los actores ocuparon los puestos de privilegio en el nacional efectuado en San Juan de Pasto, Nariño.    El nombre del grupo de teatro con 9 años de trayectoria, representa ese rostro sonriente y de tristeza en una sociedad, el contraste de la existencia humana en un mundo de máscaras para simbolizar una realidad.  ‘Silbando Marías’ convoca a recordar a las víctimas de nuestro Catatumbo, esas que salen de la tierra para poner en evidencia la vida que se desangra hasta la muerte en medio del olvido, indica la directora Bexy Amparo Mendoza Cuadros.
 
Una adaptación especial de escenas sobre conflictos armados en la convulsionada región. Una creación colectiva que reencarna el sentir en cuerpos y memorias compartidas.

“Es una puesta en escena donde una joven vuelve al pasado, para revivir la calidez de su madre en medio del desplazamiento, del horror de la guerra que va y viene entre los silbidos de las balas”, recalca.
 
Surge a partir de esta historia el rostro de otros relatos desgarradores, personajes que caminan arrastrando el dolor que vivieron antes de sus muertes, esperando que sus pasos no se repitan, descarnadamente desnudan la barbarie de un territorio que sangra a diario.

Lea además: ‘Poder rosa’ del Catatumbo llega hasta Buenos Aires, Argentina

Sus cuerpos como imágenes conectadas se hacen visibles en el transcurso de la obra, cruzándose como hilos conectores de un todo. Finalmente, María retorna al presente con un texto emotivo, liberador, reparador, invitando a un nuevo despertar, ofreciendo la posibilidad de otro comienzo, ganándole una vez más la lucha al rencor, la venganza y el odio, dice Manzano.
 

El grupo de teatro La Mueca de la universidad Francisco de Paula Santander, seccional Ocaña busca resarcir el tejido social a través de las artes dramáticas.
‘Silbando María’ en el Faro del Catatumbo 

La historia nace en una región bastante convulsionada de Colombia con grandes riquezas naturales, pero con un conflicto arraigado por décadas.  Se toma como referencia el Faro del Catatumbo, un fenómeno natural que se produce gracias a las numerosas tormentas eléctricas en la Cuenca del Lago Maracaibo en Venezuela.

El origen está en el efecto orográfico de las cordilleras que encierran y frenan a los vientos del noreste, produciéndose nubes de gran desarrollo vertical. Sin embargo, se concentra principalmente en la Cuenca Inferior del río Catatumbo, de donde procede su nombre y la mejor época para observarlo transcurre entre los meses de abril y noviembre desde las 20:00 horas hasta la madrugada; es decir, alrededor de 240 noches al año. En medio de esos relámpagos emerge la historia de María, una sobreviviente del conflicto armado que simboliza la resiliencia de la mujer campesina que lucha por un futuro mejor a las generaciones.

Lea además: Mujeres catatumberas, cada vez más emprendedoras

 Busca un punto de equilibrio, la armonía y la complicidad, la obra trasmite ese mensaje de resistencia, vincula a los personajes a indagar lo que está pasando. A través de las tablas la gente puede conocer las diferencias, interpretar las diferentes posturas de los protagonistas de la historia, indica el actor Jesús Pérez.
 

El grupo de teatro La Mueca de la universidad Francisco de Paula Santander, seccional Ocaña busca resarcir el tejido social a través de las artes dramáticas.

El artista 

Juan Carlos Manzano Carrascal nacido en el año 1966 es uno de los grandes exponentes del arte ocañero, Actor, mimo, dramaturgo. Estudió licenciatura de Artes representativas de Universidad de Antioquia.
 
Creador de la obra ‘Silbando Marías’, recopilando testimonios de las víctimas del Catatumbo para visibilizar el problema e impedir la repetición de esos macabros episodios. En su labor por medio de los títeres, el teatro, las pantomimas y con estrategias diversas logra que el público presente capte directamente los temas a tratar. 
 
Participó en las campañas de cultura ciudadana de Antanas Mockus en Bogotá y es un convencido en la fuerza reparadora del tejido social por medio del arte.
 

Lea además: Diócesis de Ocaña, 60 años de vida pastoral en el Catatumbo

La intención es llevar el mensaje a todos los rincones del Catatumbo, Norte de Santander, Colombia y América Latina para promover las manifestaciones artísticas como eje dinamizador y transformador de la cultura.


Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion


 

El grupo de teatro La Mueca de la universidad Francisco de Paula Santander, seccional Ocaña busca resarcir el tejido social a través de las artes dramáticas.
Temas del Día