Sobre el suelo lleno de hojas y ramas secas, justo donde inicia el puente de la vereda El Diamante de Puerto Santander, yacía el cuerpo sin vida de Arnulfo Cáceres Páez. A su alrededor, una docena de vainillas percutidas daban muestra de que sus asesinos le dispararon sin piedad.

Cáceres Páez de 50 años residía en ese municipio y su cadáver quedó bocarriba, vestido de camisa naranja con bluyín y tenis, a su lado quedó una gorra y un celular. Su cuerpo fue impactado desde el dorso a la cabeza. Sus verdugos dejaron una cartulina azul en la que escribieron “por rata y ladrón”.

El crimen de este hombre ocurrió hacia las 4:00 de la tarde del sábado, y al parecer sus asesinos cruzaron a territorio venezolano.

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Una fuente judicial aseguró que la víctima era conocida como ‘Cucaracho’ y estuvo en prisión. “Pagó cárcel por concierto para delinquir agravado en 2013 y 2015”, dijo.

El hecho violento ocurrió a cinco kilómetros del casco urbano y en inmediaciones del río Grita. Puerto Santander históricamente ha sido un territorio en disputa por la guerrilla del Eln y el grupo criminal Los Rastrojos.

“Entre las averiguaciones que hemos hecho se presume que la víctima haya sido colaborador de un grupo delincuencial y en represaría otro actor armado cometió el asesinato”, dijo otra fuente judicial.