Una de las situaciones que limita el desarrollo las microempresas es que a la hora de buscar crédito en instituciones financieras hay ausencia de garantías para respaldar los créditos.
Por eso, en búsqueda de impulsar la reactivación económica desde el trabajo de la secretaría del Banco del Progreso, la cartera lanzó con el Fondo Nacional de Garantías (FNG) un nuevo producto financiero especial llamado ‘Unidos por Cúcuta’.
Este convenio beneficia a las mipymes de la ciudad y busca facilitar el acceso a crédito para los empresarios cucuteños. La forma que implementa es facilitar el acceso al crédito garantizando que el FNG cubra hasta el 90 % de la deuda, de esa manera, la entidad financiera flexibiliza el otorgamiento de crédito al microempresario.
El secretario del Banco del Progreso, Juan Diego Peña, explicó que cuando se dan este tipo de garantías los bancos no exigen codeudor para las solicitudes de crédito.
Peña manifestó que el objetivo de la alianza con el fondo de garantías es mejorar el acceso a crédito en la ciudad y reducir las barreras que dificultan a los microempresarios obtener recursos para financiar sus operaciones en medio de la pandemia del coronavirus.
Por otra parte, el funcionario dijo que la garantía cubre créditos hasta de 46 salarios mínimos ($41,7 millones).
Además, el plazo máximo de estos créditos será de 36 meses, y tendrán una garantía que cubre hasta el 90 % del capital.
Los beneficios
Al solicitar un crédito, las empresas debían cubrir el costo de las garantías por estos servicios financieros. Para los microcréditos el costo podía oscilar alrededor del 3,5 % del monto de recursos solicitado.
Un ejemplo, es que para un crédito de $15 millones el costo de acceder a una garantía sería de alrededor de $500.000. Pero ahora con la alianza, la Alcaldía de Cúcuta con el Banco del Progreso respaldará a las mipymes asumiendo este costo por ellos.
Actualmente, esta línea de garantías está activa en las entidades del Banco Agrario, Banco de Bogotá y la compañía de financiamiento Crezcamos. Peña destacó que en la ciudad estos limitantes que dificultan el acceso al crédito por instituciones financieras.
“Esto lleva a que microempresarios dependan de prestamistas informales que cobran tasas de interés exorbitantes y de esta forma limitan el crecimiento y la sostenibilidad de sus negocios”, indicó el funcionario.
Una de esas limitantes es la ausencia de garantías que respalden los créditos, y por eso, uno de los resultados que se esperan con la iniciativa es reducir la barrera para facilitar el acceso al crédito formal, así como reducir su costo.
“La invitación es a consultar sobre esta línea de crédito en el Banco Agrario, Banco de Bogotá y en Crezcamos. La semana pasada nos solicitaron aprobar garantías de más de 25 microempresas de barrios como La Merced, Ospina Perez, Antonia Santos, Aeropuerto o Cenabastos”, manifestó el secretario del Banco del Progreso.
Para la aprobación de los recursos, las entidades financieras revisarán el historial crediticio y harán una visita al microempresario.
Cada entidad evaluará los perfiles de forma diferente, por ejemplo, el Banco Agrario pide al menos tener un año de funcionamiento.
Sin embargo, las entidades no tienen un mínimo de ingresos anuales y en la visita se evalúa si el crédito corresponde con la capacidad de pago del cliente para definir ingresos y costos.