La vicepresidenta Francia Márquez convocó a una fiesta privada en su residencia para celebrar la investidura presidencial del “gobierno del cambio” que le costó al Estado más de $52 millones.
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La excéntrica celebración se llevó a cabo el fin de semana del 7 de agosto, cuando fue la posesión en la Casa de Nariño, y en ella la reconocida líder social contrató a un chef privado, al DJ Brand, y comidas y bebidas para sus invitados.
En teoría, la celebración de Francia iba a valerle al erario público cerca de $38 millones, pero a su convocatoria llegaron más personas de las esperadas y el evento terminó costando $52.453.705. Esos datos fueron recabados por el abogado Daniel F. Briceño.
Este diario, por su parte, consultó con el equipo de prensa de la Vicepresidencia la versión oficial sobre lo comentado por Briceño, pero esa oficina indicó que no dará declaraciones al respecto.
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Entre los lujos de la vicepresidenta estuvo un contrato por $23.024.000 al chef Rey Guerrero, quien está especializado en la preparación de platos del Pacífico, y le acompañó durante la campaña para las elecciones.
Rey Guerrero le cocinó a Francia Márquez un menú de opulento con langostinos, ceviche de siete pescados, empanadas de camarón y rollos de carne de jaiba ahumada.
La carta contratada por la vicepresidenta fue tan recargada que incluyó 150 unidades de cada uno de los platos e igual número de postres, momento de la cena para el que ordenó una torta de coco bañada en cremoso de dulce de leche.
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Incluso el presidente Gustavo Petro también tuvo su propia fiesta en la Casa de Nariño que costó $68.570.000, dineros con los que contrataron la atención para 500 personas.
Todo indica que el del 7 de agosto fue un fin de semana de fiesta porque durante esos días el exmandatario Iván Duque también hizo dos celebraciones que costaron $11.670.000 y $15.600.000, respectivamente, como despedida de su gobierno.
El contrato de las fiestas de Gustavo Petro y Francia Márquez se conoce en medio de su promesa de encabezar una administración austera, que este martes radicará en el Congreso el proyecto de ley que creará el nuevo Ministerio de la Igualdad y Equidad, una promesa de campaña y cuya cartera liderará la vicepresidenta. Si bien el Ejecutivo ha dicho que recortó los gastos en la Casa de Nariño, se han conocido otros contratos de lujos como el que hizo el Dapre para amoblar las residencias oficiales del Estado.
Fuente: El Colombiano
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