El crimen del soldado profesional Víctor Manuel Pernía Atuesta, quien era natural de El Zulia, y fue asesinado en la noche del 31 de diciembre de 2024 por otro militar cuando prestaba el turno de centinela, dañó por completo la celebración de Año Nuevo que su familia tenía planeada.
Y es que cuando faltaban escasos 15 minutos para que el 2024 finalizara, los familiares del soldado profesional que estaban muy contentos y en sus corazones anhelando que el militar estuviera junto a ellos en esos momentos, recibieron una dolorosa llamada.
Al otro lado del teléfono estaba un coronel que tenía la desagradable misión de avisarle a la familia sobre el lamentable hecho. Un ensordecedor silencio después fue acompañado por gritos de dolor y lágrimas.
La entristecida familia le preguntó al alto oficial sobre los pormenores del hecho mortal, pero solo recibieron la respuesta de que el crimen se estaba investigando y el asesino, otro militar, estaba detenido y sería presentado ante las autoridades.
Mientras todas las familias se abrazaban de alegría por recibir otro año, los familiares de Víctor Pernía se consolaban y lloraban juntos por la muerte de su ser querido, quien cumplió los 23 años justo dos días antes de que lo asesinaran, el 29 de diciembre.
El hecho
Según se conoció, todo se dio hacia las 10:00 de la noche, cuando la víctima se encontraba cumpliendo su turno como centinela en El Cerrón, por la vía a Marocazo, cerca de la Sierra Nevada, en Riohacha (La Guajira).
Mientras el soldado nortesantandereano estaba al pendiente de cualquier movimiento, un compañero suyo que, al parecer, también prestaba guardia esa noche, le propinó dos balazos en la cabeza.
El grupo de uniformados que se encontraban en el lugar se percataron del sonido de los balazos de fusil y encontraron el cuerpo sin vida de Víctor Manuel.
“A nosotros nos dijeron que al asesino lo detuvieron y ya hay un proceso jurídico en su contra, mientras avanzan las investigaciones para establecer qué motivos tuvo el militar para atentar contra la vida de nuestro ser querido”, contó un familiar de la víctima.
Los familiares de Víctor Pernía, quien era orgánico del Grupo de Caballería Mecanizado Juan José Rondón, de la Décima Brigada, ahora esperan que el cuerpo de su ser querido llegue a El Zulia para darle el último adiós.
“Estamos esperando porque nos dijeron que se demoraba tres días y a la fecha no ha llegado el cuerpo de Víctor y que el Ejército dé a conocer públicamente qué sucedió porque todo lo han mantenido en silencio”, comentó un familiar del soldado.
Ellos le piden al Ejército y a las demás autoridades correspondientes que haya justicia y prontamente les indiquen por qué asesinaron de dos disparos en la cabeza a Pernía Atuesta, quien llevaba cuatro años en la institución.
La última llamada
En medio del dolor y las lágrimas, los familiares recordaron que Víctor Manuel los llamó por última vez hacia las 6:00 de la tarde de ese martes, para decirles que estaba bien y los amaba.
El soldado profesional les mandó saludos a varias personas y también les dijo que a medianoche los volvía a llamar.
Esa fue la última vez que los familiares tuvieron comunicación con la víctima mortal, la cual siempre se caracterizó por ser un hijo ejemplar que tenía el sueño de darle una casa a su mamá.
Víctor Manuel era el segundo de tres hermanos, todos soldados profesionales.
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