Momentos de pánico vivieron los habitantes del barrio Cumbres del Norte, ayer, a las 11:30 de la mañana, cuando escucharon unos disparos y luego vieron a Jesús David Chávez Jaimes corriendo por una calle, mientras un desconocido iba detrás de él, accionando una pistola.

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Como una ‘escena de una película de acción’ describieron algunas personas el asesinato de Jesús David, de 31 años. Para ellos fue impresionante ver cómo el pistolero le apuntaba a la víctima y le disparaba, pero no lograba impactarla.

“Eso pasó en cuestión de segundos. Se notaba el miedo que tenía el señor (Jesús Chávez), porque corría  como ‘alma que lleva el diablo’, mientras sonaban los disparos, nosotros no vimos que lo hirieran, porque ni quedó sangre por ahí. Lo mataron más adelante”, indicó un habitante de esa zona de Cúcuta.

Así se dio la persecución

Las autoridades tratan de esclarecer si a Chávez Jaimes lo persiguieron durante varios minutos por diferentes cuadras de ese barrio o, por el contrario, estaban esperando a que el pasara por la calle 25 con avenida 8 para matarlo.

La víctima se movilizaba en una motocicleta Yamaha GN, negra, de placa MFG18G, cuando, presuntamente, un desconocido que iba en otra moto lo interceptó y comenzó a dispararle.

Jesús Chávez llegó hasta esa cuadra, pero de un momento a otro dejó tirada la moto y corrió hasta la calle 25 con avenida 9, mientras el pistolero lo seguía y accionaba su arma.

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Luego la víctima se metió a una callejuela que comunica con la Avenida Camilo Daza para tratar de salvar su vida, pero el pistolero también ingresó hasta ese angosto camino y al ver que Chávez Jaimes estaba tirado en el piso tras caerse, le disparó en la cabeza, el pecho, la espalda y cuello, luego emprendió la huida.

“El señor dejó una chancleta tirada cuando salió corriendo. Al parecer, como iba corriendo y la entrada a la callejuela no tiene pavimento se resbaló y se cayó, el cuerpo tenía unas raspaduras”, indicó una fuente judicial.

La comunidad alertó a la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) sobre el asesinato de un hombre que no era del sector, porque nadie conocía y minutos más tarde, varias patrullas llegaron hasta el sector y junto con la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) se encargaron de la inspección técnica.

Cuando los investigadores judiciales llegaron a donde estaba el cuerpo y la motocicleta, encontraron 9 vainillas y una bala, las cuales fueron recogidas, al igual que los diferentes testimonios.

Protagonizaron una escena de dolor

La pareja sentimental de la víctima también llegó al lugar y al ver el cadáver comenzó a gritar y llorar. La mujer iba acompañada por otras dos personas, quienes la consolaban.

“Por qué, por qué, qué pasó Dios mío. Esto es muy duro”, gritaba la mujer ante la presencia de varios curiosos y residentes de ese sector. Luego llegó el papá, se sentó en una barda por unos minutos, mientras lo entrevistaban las autoridades.

Quince minutos después, tanto la mujer como el papá y otros familiares, caminaron hasta donde estaba la motocicleta custodiada por las autoridades, para preguntar si se la podían llevar.

El cuerpo de Jesús David Chávez fue trasladado a las 12:50 p. m., por la Brinho hasta Medicina Legal.

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