La comunidad de Tibú pensó que tener el municipio militarizado, con alta presencia de las autoridades, los protegería en medio del conflicto armado que se vive en todo el Catatumbo, pero no fue así porque a plena luz del día y en uno de los sitios más transcurridos del casco urbano, se presentó un doble homicidio.
El hecho se presentó la mañana de este domingo cuando en el sector de la Plaza de Mercado todo transcurría en completa normalidad. Sin embargo, a eso de las 9:30 de la mañana, se dio la tragedia.
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Según algunas versiones, varios hombres armados llegaron movilizados en unas motocicletas hasta el lugar.
Primero identificaron a un menor de edad que estaría en un establecimiento comercial a quien, sin mediar palabra, le dispararon en repetidas oportunidades.
Luego, al otro lado de la vía, junto a su motocicleta, se encontraba Jefferson Blanco, que se convirtió en la segunda víctima. A él lo atacaron a bala después del adolescente.
Tras cometer el hecho, los agresores habrían huido con rumbo al sector de La Pista, sin dejar ningún rastro, mientras Blanco y el menor de 15 años agonizaban, tendidos en el piso, a la vista de todos.
El lugar fue rodeado de una veintena de personas que observaban la escena, sorprendidos por lo que acababa de suceder.
Minutos más tarde, uniformados de la Policía de Norte de Santander llegaron hasta el sitio para adelantar los actos urgentes, la inspección de la escena y el levantamiento de los cadáveres.
¿Los despistaron?
Se pudo conocer que una media hora antes de que se perpetrara el crimen, las autoridades estaban haciendo presencia en ese sector, pero una llamada cambió la mañana por completo.
Presuntamente había una persona que se encontraba en peligro por los alrededores de la Terminal de Transporte y debían brindarle la protección requerida.
Y así lo hicieron. Mientras los policías se fueron a buscar a la supuesta víctima y, posteriormente, llevarla al Batallón del Ejército Nacional, los hombres armados aprovecharon para hacer de las suyas.
“Creemos que sí pudiera haberse tratado de una manera planeada para despistar a nuestras unidades que estaban protegiendo a la población civil porque tan pronto ellos abandonan la zona, se registró el lamentable hecho”, comentó una fuente judicial.
Por la misma disputa
Según las autoridades, las víctimas tendrían alguna relación con la disidencia de las Farc y sus agresores serían del Ejército de Liberación Nacional (Eln).
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“La información que tenemos de inteligencia es que el menor de edad sería miliciano y haría parte de la estructura de alias Harold. Por su parte, de la otra víctima sería también de la misma estructura y lo conocerían como Yeyo o El Gordo”, dijo la fuente judicial.
Añadió que “no conocemos exactamente cómo fueron las circunstancias del hecho, pero sí creemos que les estaban haciendo algún seguimiento porque sabían perfectamente dónde estaban y qué estaban haciendo”.
Otro ataque
El ambiente tenso que se percibía el domingo en el municipio de Tibú era evidente pues, tras el doble crimen, una serie de ataques se fueron presentando durante el día.
Un par de horas más tarde, en las Torres de León, un mototaxista también habría sido víctima de hombres armados, quienes le hicieron algunos disparos que, por fortuna, ninguno le impactó. Sin embargo, el mensaje fue claro para todo el gremio en ese momento.
“Todos los mototaxis vamos a guardarnos y a quitarnos los chalecos porque ya nos hicieron una advertencia. Mañana será otro día”, se escuchaba en uno de los mensajes que se difundieron por WhatsApp.
Luego, en la tarde, por el barrio Libertadores, otro joven fue atacado a disparos cuando se movilizaba por las calles del casco urbano.
Según algunos testigos, la víctima alcanzó a correr para buscar refugio de las balas y sus agresores en un establecimiento comercial.
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