De no haberse solucionado el impasse entre los presidentes de Estados Unidos y Colombia, Donald Trump y Gustavo Petro, hubiese habido consecuencias graves para la economía, incluyendo la de Norte de Santander, pues, el republicano había anunciado un aumento de 25% en los aranceles a los productos colombianos, para un total de 50%; en respuesta, su homólogo decidió lo mismo.
La nación norteamericana es el principal socio comercial. De acuerdo con el presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), Javier Díaz Molina, se trata de una relación clave, porque, el año pasado, a corte de noviembre, las exportaciones a ese país llegaron a US$13.000 millones.
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Díaz precisó a La Opinión que, en importaciones, fueron, aproximadamente US$13.400 millones. Además, en inversión extranjera directa son cerca de US$5.000 millones anuales.
“Del lado de exportaciones de Norte de Santander, entre enero y noviembre de 2024, Estados Unidos tiene el puesto 20, con una participación de 1,4% en el total, con cerca de US$10 millones”, precisó el presidente de Analdex.
Respecto a las importaciones desde ese país al departamento, el economista detalló que registraron unos US$70 millones, entre enero y octubre de 2024.
El director ejecutivo de Investigaciones Económica de Corficolombiana, César Pabón, recalcó que alrededor de un tercio de las exportaciones del país van hacia EE. UU., he ahí el peso del socio comercial.
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“Pero también cerca de la mitad de la inversión extranjera directa y de las remesas que llegan a Colombia provienen de Estados Unidos. Entonces, este impasse lleva a perder la confianza con el que ha sido nuestro socio estratégico históricamente”, añadió Pabón.
El economista señaló que las inversiones extranjeras, particularmente de Estados Unidos, son decisiones de largo plazo, pero la breve ruptura de las relaciones genera un ambiente de gran incertidumbre. Por lo tanto, sería predecible que en el mediano y largo plazo se empiece a haber un flujo más reducido de inversiones.
Lo que comercializa Norte de Santander
Según cifras del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo y Analdex, la mayor parte de la canasta exportadora de Norte de Santander a EE. UU. corresponde a bienes minero energéticos, la cual se concentran en carbón. Las hullas térmicas tienen una participación 85,8%.
Además de carbón, vende a ese país café (5,86%) y harina de maíz (2,7%), en el segundo y tercer puesto. Las tejas, baldosas y elementos de chimeneas abarcan el 1,2% de las exportaciones. También calzado, productos de origen animal, instrumentos para análisis físico y químico y sebo de bovinos.
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Entre los bienes que le compra a esa nación se encuentran, principalmente, el polietileno (56,2%), el gas propano licuado (23,2%), policloruro de vinilo (6,5%) y gases butanos licuados (4,3%). También polímeros de etileno, carne porcina, topadoras y niveladoras.
Las lecciones
La situación deja tres lecciones, según el presidente de Analdex. La primera es ver a EE. UU. como un aliado y no como enemigo. Por eso, “lo que viene será fundamental para que el tiempo cure las heridas”.
“Temas de migración y narcotráfico estarán a la orden del día y debemos tener una ruta clara de cooperación, para que esto no amenace de nuevo las relaciones comerciales”, agregó Javier Díaz
La segunda lección es que quedan interrogantes de cómo se aplican los aranceles por motivos de seguridad nacional o de otra índole. El economista destacó que, del lado colombiano, el arancel inteligente sería una figura a la cual se acudiría. Sin embargo, hizo un llamado a que se haga un análisis profundo y a conciencia, antes de recurrir a ellos, porque puede traer efectos en la economía local.
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“La tercera es afianzar la diversificación y que no se quede en el papel. No debemos tener todos los huevos en una misma canasta, fortalecer la relación comercial con otros socios, como Asia”, apuntó.
El economista César Pabón subrayó que la relación con la potencia mundial “es transversal, y lo vimos en los análisis preliminares, porque cerrar las puertas con Estados Unidos impacta los temas comerciales, pero más importante aún: afecta el crecimiento económico, en la medida en la que gran parte de nuestras industrias y, en general los productos más sofisticados que hacemos se exportan a ese país”.
El director ejecutivo de Corficolombiana afirmó que, igualmente, una relación binacional inestable puede generar presiones inflacionarias, dada la incertidumbre, y una depreciación del tipo de cambio o caída del peso colombiano.
“También podemos ver efectos de tipo fiscal. Recordemos que Ecopetrol y nuestro principal producto exportación (el petróleo), casi que la mitad, se exporta a Estados Unidos. Por lo tanto, el debilitamiento de este relacionamiento tiene incidencia en las finanzas públicas”, concluyó Pabón.
El dato
En 2023, las exportaciones desde Norte de Santander al mundo sumaron US$1.004,5 millones; solo a Estados Unidos fueron de US$13,8 millones, un aumento del 92,2% con relación a 2022.
Ese año, el departamento importó desde el mundo US$142,4 millones (-18,4%); solo de EE. UU. fueron US$39,9 millones, un crecimiento del 0,5%.
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