En un mundo donde los momentos especiales merecen celebrarse con grandeza, el Hotel Casino Internacional se consolida como el epicentro de los sueños hechos realidad para cientos de familias que desean brindar a sus hijas una fiesta de quince años inolvidable.
Celebrar los quince no es solo alcanzar un número en el calendario; es despedirse de la infancia para abrirle paso a la juventud, a las ilusiones y a nuevas metas. Conscientes de la carga emocional y simbólica de este rito de paso, el Hotel Casino Internacional ha convertido la organización de estas celebraciones en todo un arte. Aquí, cada fiesta de quince no es un evento más: es el comienzo de una historia que se escribe con luces, música, emociones y sonrisas.
Atención al detalle: el sello de una experiencia única
“Ningún detalle queda al azar”, afirma con convicción Luzbet Yaneth Cadete Rojas, ejecutiva de ventas del hotel. Esa premisa ha hecho que padres e hijas no solo elijan, sino también recomienden este lugar como el escenario ideal para una noche mágica. Desde el primer contacto, el equipo de trabajo del Hotel Casino Internacional se encarga de guiar, escuchar, proponer y ejecutar con precisión todo lo necesario para que la protagonista de la noche brille con luz propia.
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Con seis salones versátiles, con capacidades que oscilan entre las 20 y 500 personas, el hotel ofrece espacios ajustables al tamaño del sueño y al presupuesto familiar. Desde recepciones íntimas hasta grandes celebraciones, la flexibilidad del lugar permite a cada familia planear una fiesta a su medida.
Una producción de ensueño
Las celebraciones en el Hotel Casino Internacional se diferencian por su carácter personalizado. Todo gira en torno a la quinceañera y sus deseos: desde la decoración hasta el menú, pasando por la música, la ambientación y los espectáculos. Cada fiesta se convierte en una producción única, en la que se conjugan creatividad, experiencia y emoción.
“El salón Casino, por ejemplo, se transforma completamente según la temática elegida. Podemos convertirlo en un castillo de princesa, en el comedor de Hogwarts o en un escenario lleno de luces y modernidad”, explica Yolima Pedraza, otra de las ejecutivas del equipo comercial. “Las familias vienen con sus ideas, nos cuentan qué quieren, y nosotros las llevamos de la mano hasta materializarlas”, añade.
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Además, las familias tienen la libertad de contratar decoradores externos si así lo desean. Esa apertura es parte del compromiso de brindar una experiencia a la altura de las expectativas.