Una victoria muy importante alcanzó el gobierno de Gustavo Petro al lograr que la plenaria de la Cámara de Representantes aprobara, sin discusión y en el típico pupitreo, el proyecto de ley de la reforma pensional con 88 votos y contra 23 votos por el no, con lo cual se evitan que la reforma tenga que ir a una conciliación.
Esta es la primera de las grandes reformas sociales del gobierno nacional que logra convertirse en ley de la República, y se dio en medio de un fuerte enfrentamiento entre los representantes del petrismo y la oposición, la cual en su mayoría se retiró al momento de votar.
Con una proposición para que la Cámara de Representantes adoptara el texto de reforma pensional que aprobó el Senado, quedó cerrada la discusión de la iniciativa en cuarto y último debate.
Previamente, la propuesta caldeó los ánimos de algunos parlamentarios que cuestionaron que la llamada “cámara baja” estaría siendo relegada, y que con ello los representantes fueron puestos como simples notarios de las decisiones de los senadores.
En este punto hubo señalamientos contra el ministro de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones, Mauricio Lizcano, de quien se dijo estuvo “recogiendo votos” para que pasara la reforma, so pena de que él sería expulsado de esa cartera si la iniciativa no se aprobaba.
Por su parte, la representante de Risaralda, Carolina Giraldo, advirtió que haber adoptado el articulado del Senado sería una mala señal para la democracia, pues esa acción significaría que se podría cerrar la Cámara, y en tiempos en los que se ventila una Constituyente, podría ser el anticipo de que más adelante también se pueda cerrar el Senado.
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Antes se intentó debatir el artículo 94 del proyecto de reforma pensional, que establece que las modificaciones al sistema de pensiones en Colombia inicien el 1° de julio del año próximo.
Luego de más de 7 horas de discusión y tras ser derrotadas varias proposiciones para que la vigencia se diera en 2026 o en 2027 e incluso otra para que la entrada en vigor fuera escalonada, terminó imponiéndose la proposición para acoger el texto completo del Senado que defendieron los ponentes de la iniciativa, como la representante de la Alianza Verde, Martha Alfonso Jurado.
A las 11:35 de la mañana, con la presentación de constancias, la plenaria de la Cámara de Representantes comenzó este viernes el debate del proyecto de reforma pensional, texto de 95 artículos.
Luego de media hora, la discusión avanzó con la consideración del orden del día (que tras la votación fue aprobado), y la lectura de algunas proposiciones ajenas al proyecto de cambios pensionales, entre ellas la realización de una sesión colectiva de yoga (también aprobadas).
Ante la oleada de recusaciones radicadas ante la Comisión de Ética de la Cámara, contra parlamentarios y partidos políticos, la presidenta de esa Comisión, Juana Carolina Londoño, anunció que el lunes se instaurará ante la Fiscalía una denuncia, dado que buena parte de las recusaciones fueron presentadas por una persona que no aportó pruebas, con lo que aparentemente estaría intentando frenar el debate del proyecto de reforma pensional.
No obstante, en la sesión varios representantes expresaron impedimentos por recusaciones presentadas en la noche del jueves, pero la mesa directiva de la Cámara señaló que esas acciones fueron trasladadas a la Comisión de Ética.
Para el ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, las recusaciones son “trucos de tinterillos” que buscan impedir que se tramite la reforma social más importante que impulsa el gobierno de Gustavo Petro.
Los nuevos impedimentos fueron votados y negados, por lo que los congresistas pudieron hacer parte de las deliberaciones que, seguidamente, se centraron en si la votación del texto se haría artículo por artículo o en bloque, y esta última opción fue la escogida.
Una vez más la propuesta de la entrada en vigor de la reforma en julio de 2025, las dudas sobre la capacidad de Colpensiones para atender el aumento de afiliados que observará por el paso de cotizantes de fondos privados a la entidad oficial y los cuestionamientos a la implementación del llamado pilar solidario agitaron las discusiones en el recinto.
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Jaime Dussán, presidente Colpensiones, intervino para defender las bondades de la reforma y las capacidades de la entidad. “Colpensiones que tiene 12 años de vida, ha pensionado a 2.863.000 colombianos, tiene 6.844.000 personas afiliadas, lo que quiere decir que 3.986.000 personas no cotizan y de esas casi 1 millón no van a pensionarse”, mencionó el funcionario.
Más tarde, antes de las 4 p. m., el primer bloque sometido a votación y aprobado, 6 artículos, auguraron que la iniciativa tendría un trámite favorable a los intereses del Gobierno, que en el recinto estuvo representado por Velasco, así como por la ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, y por el jefe de la cartera de Hacienda, Ricardo Bonilla.
Bonilla aprovechó para reafirmar que el Ministerio de Hacienda ha acompañado la reforma pensional desde su radicación, y ha emitido un concepto fiscal favorable al articulado del texto de ponencia, asegurando que el proyecto es fiscalmente sostenible.
*Con información de El Colombiano
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