Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Ocaña
En Ocaña los habitantes de la calle sobreviven debajo de los puentes
En su mayoría son migrantes del vecino país de Venezuela.
Authored by
Image
Javier Sarabia Ascanio
Javier Sarabia
Domingo, 1 de Junio de 2025

Una difícil realidad vive los habitantes de residencia no formal que permanecen debajo de los puentes en distintos barrios del municipio de Ocaña. Estas personas, en su mayoría son de nacionalidad extranjera.

Entre los retos que enfrentan en estos sitios, se encuentran los olores nauseabundos y la falta de apoyo y atención psicosocial. 

Habitantes de calle afirmaron que la comida la rebuscan en las bolsas de basura, mientras hacen sus labores de reciclaje.  


Lea además: Prohíben el tráfico pesado de automotores por las vías internas de Ocaña


Los recursos que obtienen a partir de ello y las tribulaciones que enfrentan por vivir en ambientes densos, ha llevado a varios de ellos a caer en el mundo de la drogadicción.
 

Debajo de los puentes de Ocaña pernoctan habitantes de residencia no formal consumidores de alucinógenos/Fotos cortesía Sheila Samanta Vera Contreras.

Mujer atrapada por el monstruo 

María Bautista, es una de estas migrantes, lleva siete años viviendo debajo del puente en el barrio Las Llanadas. 

Indicó que empezó a consumir estupefacientes por curiosidad ante la influencia de unas amigas.
 
Los momentos de euforia durante las andanzas juveniles se le convirtieron en una pesadilla difícil de superar. Aseguró que llegó a Ocaña con el sueño de una oportunidad de trabajo para salir de ese mundo, pero sintió el rigor de la discriminación. 

“Nadie sabe las goteras de los demás y somos muy frágiles ante las tentaciones, la vida me ha dado muchos golpes y no he podido levantarme. Llegué con la ilusión de conseguir un oficio, pero la gente me rechaza”, agregó la joven.


Lea además: Reservorios de agua con energías limpias para el Catatumbo


Confesó que su situación se agravó con la muerte de sus padres, lo que la llevó a deambular sin rumbo fijo hasta encontrar compañía debajo del puente.
 

Debajo de los puentes de Ocaña pernoctan habitantes de residencia no formal consumidores de alucinógenos/Fotos cortesía Sheila Samanta Vera Contreras.

El gavilán mayor 

En los alrededores del puente La Opinión también conoció a Gabriel Eduardo Guevara, conocido popularmente como El Guaro. En la zona, los habitantes de calle lo consideran un padre, pues les aconseja que dediquen el tiempo al reciclaje y no al hurto.

Por recomendación de conocidos sobre las bondades de Colombia, emprendió la travesía desde Caracas hasta la zona de frontera, en donde terminó viviendo en la calle.

Gabriel Eduardo es técnico superior en aires acondicionados. Señaló que las duras condiciones en su niñez lo llevaron a probar la marihuana y el bazuco a los 11 años y hoy con 46 de edad, se siente doblegado por el vicio. 

“Ahora me siento seguro en este caño que recorre todos los puentes de la ciudad. Es un refugio para los 12 que vivimos aquí”, agregó.

Algunos vecinos cuando cambian los elementos de sus casas, regalan los colchones a los indigentes, pero los uniformados durante las redadas proceden a dañarlos.

Nos tildan de ladrones, pero nosotros no robamos, somos recicladores. Cuando alguien hurta un elemento yo mismo los entrego a la policía”.

Cuenta con doble nacionalidad y no quiere volver a Venezuela porque todo lo perdió allá. “Mi mamá vive en Ecuador junto a mi hermana”, añadió. 


Lea además: Tránsito deroga medidas de restricciones en la movilidad por el centro de Ocaña


Recomendó que nadie siga este camino tortuoso en la vida. “No creo en los centros de rehabilitación porque he visto a muchachos que salen bonitos y luego vuelven a las calles”. 
 

Debajo de los puentes de Ocaña pernoctan habitantes de residencia no formal consumidores de alucinógenos/Fotos cortesía Sheila Samanta Vera Contreras.

La ruta de atención

Ante esta problemática el Secretario de Desarrollo Humano de Ocaña, Hugo Eduardo Bayona, manifestó que la población está caracterizada y expresó la preocupación por el periodo de rehabilitación de 3 meses, el cual no parece ser suficiente para estas personas.

Informó que se avecinan los trabajos del intercambiador vial y en el mismo sentido se organiza un plan de acción con los centros de rehabilitación. 


Lea además: Vitrina comercial para las víctimas del Catatumbo se llevó a cabo en Ocaña


“Muchas de las personas no son de Ocaña y cuando finalizan el proceso no tienen cómo volver a su casa, perdiendo el esfuerzo. Esa población debe salir de la zona y en los próximos días se implementarán programas de atención integral para este retorno”, puntualizó.


Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion.


 

Debajo de los puentes de Ocaña pernoctan habitantes de residencia no formal consumidores de alucinógenos/Fotos cortesía Sheila Samanta Vera Contreras.
Temas del Día