El ambiente de algarabía y efusividad por el inicio de las Ferias de Cúcuta, que colmaba la ciudad, fue acompañado de un fuerte estallido que sacudió varios barrios de la Comuna 2. El epicentro era el barrio Popular, los causantes fueron dos sujetos con una granada.

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Sucedió en la calle 7 entre avenidas 1E y 2E, cuando faltaban apenas minutos para que el reloj marcara las 10:00 de la noche, del pasado lunes, 21 de julio. Una moto pasó por esta calle, a bordo iban dos hombres, quienes tendrían como objetivo amedrentar a un comerciante y su negocio en este sector.

El ataque iría dirigido supuestamente contra un diseñador de modas, pues los criminales lanzaron una granada de fragmentación contra su establecimiento comercial. Momentos después de la caída del artefacto en frente a una de las vidrieras, se produjo el estallido que alertó gran parte de la ciudad.

Mientras los responsables emprendieron la huida, tres grandes paneles de vidrio del local se resquebrajaron ante la explosión y la dispersión de las esquirlas, que salieron lanzadas contra los alrededores.

“Fue un susto grandísimo, ya nos estábamos preparando para dormir cuando sonó ese estruendo. Lo primero que hicimos fue llamar a la Policía y hasta que llegaron no salimos por el miedo”, comentó uno de los vecinos.

Y así fue, las autoridades no recibieron solo uno, fueron múltiples los llamados de emergencia que hizo la comunidad y que activaron de inmediato un plan de atención en la zona, a la que llegaron varias patrullas para comprobar lo sucedido y encontrar el local gravemente afectado.

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Minutos después de acordonar la zona y la llegada del equipo especializado en antiexplosivos, empezaron a asomarse los residentes del sector a ver lo sucedido. “Ahora sí estalló”, decían algunos, recordando que hace algunos días el mismo local había sido objetivo de un ataque similar, pero en aquella ocasión el artefacto explosivo no detonó.

La revisión de las cámaras de seguridad también fue inmediata, para tratar de establecer características de los responsables y detenerlos poco después. Sin embargo, a cierre de esta edición no se había logrado ninguna captura relacionada con el caso.

Por el momento, se desconocen qué individuos o grupo criminal estaría detrás de este ataque, perpetrado en una zona cercana a dos colegios, como el Salesiano y La Salle. Las autoridades apuntan a los AK-47 o el Tren de Aragua, al ser dos de las principales bandas con injerencia en este sector, aunque no se descartará ninguna agrupación hasta establecer a los responsables.

El móvil detrás del hecho sigue siendo materia de investigación, sin embargo, la principal hipótesis apunta a un ataque relacionado con el cobro de extorsiones.

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