En un sentido religioso y espiritual, los arcoíris están relacionados con un símbolo de calma después de la tormenta y con el pacto que hizo Dios con la humanidad de que nunca más volvería a enviar un diluvio a la tierra. 

Lea también: En octubre entregarán los diseños del Policlínico de Atalaya

Pero esta señal también ha sido utilizada para hacer alusión a las madres que, tras la pérdida de un bebé, logran procrear nuevamente para convertirse en mamás arcoíris, donde un nuevo ser les devuelve el color a sus vidas. 

Y es que, aunque el deseo de las mujeres embarazadas es lograr una gestación sana, desafortunadamente existen maternidades diferentes que no se eligen, sino que llegan y cambian los esquemas de la concepción. 

Samuel Enrique Bautista, médico cirujano, especialista en ginecología y obstétrica de la ciudad de Cúcuta, explicó que las mamás arcoíris son aquellas que han tenido pérdidas tras un aborto involuntario, muerte fetal (pérdida de un bebé antes o durante el parto) o muerte neonatal (muerte ocurrida entre el nacimiento y los primeros 28 días completos de vida), pero posterior a esto vuelven a quedar en gestación. 

Para quienes han deseado con todas sus fuerzas convertirse en madres, una pérdida puede frustrar completamente su sueño, sin embargo, el profesional señala que sí es posible volver a generar vida y traer al mundo bebés arcoíris, eso sí, cumpliendo con todas las recomendaciones médicas. 

Entérese: Desastre en Las Américas: Explosión de tubería afecta locales comerciales

“Para volver a quedar en embarazo tras una pérdida, se recomienda antes acudir a una consulta preconcepcional con el ginecólogo, el cual estará evaluando el caso, por medio de exámenes y de esta forma poder definir el tratamiento a seguir para que las posibilidades de que pueda ocurrir otra pérdida gestacional sea escasa”, apuntó el doctor. 

Bautista indica que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se recomienda esperar seis meses antes de volver a quedar en embarazo, aunque algunos profesionales de la salud precisan que incluso, tres meses después también es un tiempo aconsejable. 

En este sentido, el experto detalla que es importante tener en cuenta los factores que pueden incidir en las pérdidas gestacionales, para prevenir cualquier riesgo. 

Entre esos se encuentran las enfermedades crónicas como presión arterial alta, enfermedad tiroidea, síndrome del ovario poliquístico y diabetes. 

Lea aquí: Ya se abrieron cupos de cobertura a la tasa de interés en el programa de Mi Casa Ya

Así como también, algunas condiciones relacionadas con el embarazo, como una gestación múltiple, diabetes gestacional, preeclampsia y eclampsia.

Además de esto, las pérdidas se pueden generar por el desarrollo anormal del embrión, problemas uterinos, desprendimiento de placenta, obesidad o delgadez excesiva, enfermedades del sistema autoinmune o infecciones y hábitos de vida no saludables como fumar, consumo de alcohol, sustancias psicoactivas y exceso de cafeína. 

Frente a la edad, Bautista señala que este es un factor importante, ya que por encima de los 35 años pueden aumentar las tasas de pérdidas gestacionales o de pérdida de los embriones en estas madres gestantes. 

Más información: Elección del próximo contralor se daría solo hasta agosto

“Sin embargo, hoy en día, con la tecnología en fertilización in vitro, se pueden hacer estudios genéticos a este tipo de embriones, así antes de realizar la fertilización se pueda determinar que estos embriones no tienen ningún problema genético y así poder llevar un embarazo a término, en la mayoría de veces”, agregó el profesional. 

El doctor manifestó que un gran porcentaje de mujeres que han pasado por un aborto espontáneo logran tener un embarazo saludable después de dicho episodio. 

Con un nuevo embarazo, el doctor resalta la importancia de asistir a todos los controles prenatales y seguir las recomendaciones médicas, así como “llevar un estilo de vida saludable, comer bien, dormir lo necesario, practicar algún deporte acorde a la condición médica”. 

Lea además: El cáncer de piel aumenta en Colombia

¿Cuándo es el mejor momento para volver a intentarlo?

Y es que después de una pérdida, es inevitable que los miedos y la angustia invadan a los padres, especialmente a la madre, quien necesita encontrar la confianza necesaria para volver a intentarlo. 

Frente a esta situación, la psicóloga Sol Nathalia Obando sostiene que es importante que los papás lo intenten cuando se sientan preparados emocionalmente y físicamente, pues en este tipo de pérdidas también debe vivirse un duelo que obviamente trae sentimientos de tristeza y ansiedad. 

Le puede interesar: Empresa de Elon Musk fue autorizada a ensayar implantes cerebrales en humanos

“Y en el caso de quedar en embarazo nuevamente podrán sentir inseguridad sobre el desarrollo y curso del nuevo embarazo, ya que existe el temor que pueda ocurrir lo mismo. Por tanto, es recomendable que la madre y el padre se den el tiempo necesario para recuperarse emocionalmente”, dijo la profesional. 

La psicóloga precisa que es fundamental que los padres tengan en cuenta que la llegada de un nuevo bebé no sustituye a la criatura que falleció, ya que este, como cualquier otro, “necesita poder ser él mismo, sin sucesos heredados y la tranquilidad de desarrollar su propia individualidad, sin tener que sufrir la pérdida de ese hermano al que nunca conoció; teniendo en cuenta que no se le debe ocultar lo sucedido”. 

Por su parte, Cristina Cruz, psicóloga especializada en psicología perinatal, comentó que los bebés arcoíris representan momentos de grandes alegrías, y aunque los padres siempre llevan el recuerdo de la pérdida de su hijo, con un nuevo ser tienen motivos para continuar en medio de la adversidad.

Lea: La razón por la que Norte de Santander ya no tiene reservas de petróleo

Explicó que los padres deben vivir la etapa del duelo y permitirse sentir cualquier emoción, expresándolas principalmente con el círculo de personas más cercano. 

“Las mamitas deben sentir, no pueden cohibirse de expresar su alegría porque han sufrido una pérdida previa. Hay que acoger los sentimientos de tristeza, de alegría, de incertidumbre, todos están ahí para mostrarles el valor de lo que están viviendo”, añadió. 

¿Cómo recibir a un bebé arcoíris?

El doctor Bautista destacó que los bebés arcoíris son importantes para la madre que ha pasado por una dura pérdida, ya que renuevan la esperanza de la vida y es allí donde la mujer puede ser capaz de transformar su dolor en amor. 

Más información: Sancionan a la UFPS por no atender al sindicato de trabajadores

“A nivel pediátrico se deben dar todos los cuidados necesarios, como esquema de vacunas, lactancia y chequeos médicos a las fechas acordadas. A nivel emocional es importante el contacto físico con sus padres, ya que en esta etapa, el bebé necesita sentirse seguro en un lugar que es totalmente nuevo para él, así mismo, ayudará a que creen una conexión afectiva madre e hijo única que será importante en todo su desarrollo emocional”, precisó el profesional. 

Al elegir un nombre para este bebé arcoíris, la profesional Cruz indica que no puede dársele el mismo que planeaban asignarle a la criatura que se perdió, ya que este nuevo miembro de la familia no viene a sustituir al otro.  

“A  medida que pase el tiempo tampoco será agradable, ya que cuando el niño crezca puede sentirse afectado al entender lo que ha ocurrido”, añadió la profesional. 

Lea también: Estas son las misteriosas teorías tras la desaparición de los niños en la selva del Guaviare

‘No fue fácil, pero volvimos a sonreír’ 

Camila Sánchez tenía 29 años cuando se enteró que sería mamá por segunda vez, un embarazo anhelado, pues con su esposo Nicolás soñaban con convertirse nuevamente en padres y darle un hermanito a su niña de 3 años, Juliana.

Lea además: ¿El dolor pélvico sería un signo de complicaciones en la salud?

La emoción se apoderó de esta familia cuando les revelaron el sexo de su bebé, pues sería un varoncito. Todo estaba planeado y la familia esperaba con ansias la llegada de un nuevo integrante, pero los planes de la vida eran otros.

“Tenía 24 semanas cuando fui a un control con el ginecólogo porque no me estaba sintiendo muy bien y había tenido leves dolores en la pelvis. Ese día me tocó ir con mi hermana porque Nicolás estaba trabajando y no pudo sacar el permiso, todo parecía una cita normal y yo solo esperaba que mi bebé estuviera bien, pero no fue así, nos dijo que no habían latidos”.

Para Camila, escuchar estas palabras fueron como morir en vida, pues en quien pensó primero fue en su esposo, “yo solo pensé, ¿qué le voy a decir a Nicolás? Me fui con un bebé en mi vientre y debo regresar sola”.

Lea también: Serían más de 700 los desaparecidos en la frontera colombo-venezolana

Allí comenzó un proceso que, para Camila fue difícil de asimilar, ya que lo que para los doctores representaba un feto muerto, para ella era su hijo, el hermano de Juliana, el niño tan anhelado.

“Tuve un parto, pero no escuché llorar a mi bebé. Tengo la imagen de mi niño en mi mente, lo recuerdo siempre y cuando me preguntan cuántos hijos tengo, siempre serán 3”, apuntó Camila.

Después de esta pérdida, Camila y Nicolás tuvieron que vivir un proceso de duelo en el que tuvo que estar involucrada su pequeña Juliana, y en el que pasaron por muchos altibajos, ya que el miedo se apoderó de esta familia al pensar en concebir nuevamente.

Le puede interesar: ¿CENS también bajará las tarifas de energía como lo decidió EPM?

Sin embargo, después de año y medio decidieron intentarlo nuevamente y la vida volvía a sonreírles.

“Yo empecé a tener síntomas y le dije a Nico que creía que el arcoíris estaba por salir, así que decidimos ir a hacernos la prueba y dio positiva, teníamos miedo, pero hoy Valentín es prueba de que después de las fuertes olas, el mar entra en calma”, expresó Camila.

El nuevo embarazo de Camila transcurrió sin problemas. Aún en medio del miedo, esta familia se llenó de valentía y con mucho acompañamiento de los seres más queridos, pudieron llegar a feliz término.

Camila se convirtió en mamá arcoíris de un nuevo varón, quien llegó para acompañar a Juliana y llenar su hogar de más amor.

Entérese: Duras críticas al Gobierno por no apropiar presupuesto para bajar tarifas

“Siempre le decimos a Juli que es muy afortunada, pues tiene dos hermanos. Uno que está en el cielo y otro que estará a su lado, pero ambos la van a acompañar siempre”, puntualizó Camila.

Para esta familia, perder a su bebé no ha sido fácil, sin embargo, en medio del caos, han entendido que fueron elegidos para vivir este proceso el cual les ha enseñado que la familia siempre está primero. 

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en:  https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion .