En Oklahoma, Estados Unidos, hay polémica e indignación tras conocerse un caso de violación contra una menor de 11 años. El hecho ha causado impacto debido a que la niña quedó embarazada.
El caso se ha viralizado en redes sociales tras la detención de tres personas por este hecho. Los detenidos son: la mamá, el padrastro y la abuela, de la menor, por permitir el abuso sexual.
Lo indignante de este caso de violación contra una menor
Tras la alerta de un vecino del condado de Muskogee, las autoridades se dirigieron a la vivienda de Cherie y Dustin Walker, una pareja, ambos de 34 años, quienes vivian con sus 6 hijos y varios animales.
El vecino en cuestión indicó que dicha familia vivía en condiciones deplorables, sumado a eso la información de que una menor de edad había dado a luz en esa vivienda.
Durante esa visita, las autoridades lograron constatar que era cierto la información de que una niña había dado a luz. Tras esto, los padres de la menor, insistieron en que no sabían que la niña estaba en embarazo.
Pese a que la niña era muy pequeña, el bebé tenía un tamaño normal, según indicaron las autoridades. En el informe, también se detalló que la niña dio a luz en la semana 36 de gestación y que nunca recibió atención prenatal ni había visitado un médico en más de un año.
Lo indignante del caso fue que, una prueba de ADN sacó a la luz un hecho aún más repudiable. La prueba constató que, el padre del bebé que tuvo la menor, era 99.99% compatible con Dustin Walker, padrastro de la niña.
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Tres capturas por este lamentable caso de violación
Ante este repudiable caso, las autoridades detuvieron a la pareja de 34 años, por cargos de negligencia infantil.
Se conoció que la pareja había sido detenida por seis cargos de negligencia infantil; no obstante, los resultados de la prueba de ADN, a los dos padres se les sumó un cargo más.
Para el padre, Dusti, se le acusó formalmente de abuso sexual infantil y a la madre, Cherie, de estar enterada del abuso y de permitir dicha violación.
La tercera persona en cuestión, la abuela de la niña, Michelle Justus, también fue detenida. Esta mujer, le dijo a los medios de comunicación que: “Convirtieron a mi hija y a mi yerno en un monstruo. No lo son. Aman a esos niños. Los aman”.
Justus tras entregar su versión a las autoridades, le tumbó la mentira a los padres de la menor, quienes inicialmente habían indicado que no sabían del embarazo de la niña.
Justus le dijo que ellos sí sabían del embarazo, pero que su hija le había dicho que el papá del bebé era otro menor de 12 años. Según ella, los menores habían sentido “curiosidad” y la niña resultó embarazada del otro niño.
Debido a las pruebas halladas, la abuela también fue detenida por seis cargos de negligencia infantil.
Menores vivían en condiciones inhumanas
Una vecina de esta familia, identificada como Cheryl Adkins, le manifestó a un medio local que había hecho llamadas a las autoridades porque temía por las condiciones de los niños, ya que la casa estaba en mal estado.
En los registros de la Policía se detalló que, en efecto, los menores vivían en condiciones deplorables, ya que en la casa faltaban servicios básicos. Asimismo, el lugar estaba lleno de heces de animales. En ese mismo lugar, la niña de 11 años dio a luz a su bebé.
Ante la captura de las tres personas, los hermanos de la niña, los menores de edad -de 2, 4, 6, 7 y 9 años- fueron llevados a un albergue.
Janet Hutson, fiscal adjunta del condado de Muskogee, se refirió a este indignante caso. “Este es uno de los casos más graves, si no el más grave, de abuso y negligencia sexual infantil que he procesado”.
“Esta niña está traumatizada. Ha pasado por una experiencia terrible. No solo la embarazó, sino que dio a luz en casa sin asistencia médica, y esta será su vida para siempre”, sentenció la fiscal.
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