Una oscura casualidad está empezando a conectar los puntos detrás de una reciente, y preocupante, racha de homicidios contra habitantes de calle que ha sacudido a Cúcuta, pues por tercer día consecutivo, uno de ellos fue asesinado a disparos.

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Al parecer, esta racha de sangre sería producto de una cruel guerra entre bandas delincuenciales, dedicadas a la comercialización de estupefacientes, entre las cuales manda el pensamiento “si no me compra a mí, no le compra a nadie”.

Pues todo parece indicar que, por lo menos dos de estos tres asesinatos, estarían relacionados con el microtráfico, y los criminales estarían cobrando las vidas de aquellas personas que le compran la droga a las bandas rivales, como una retaliación.

“Hay fuertes indicios de que detrás de los homicidios hay una banda ‘cazando’ a los clientes de la otra, para afectar su economía y meter miedo”, señaló una fuente judicial.

Los habitantes de calle serían la víctima ideal, pues sería fácil encontrarlos en lugares oscuros y solitarios, escenario perfecto para la comisión de los asesinatos, tal cual pasó ayer, 19 de noviembre, en el barrio Pizarro.

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El último caso

Fue en una zona boscosa, en la que abunda la basura, los restos de mechero y demás desechos, al margen de la avenida 9 con calle 9AN, en la que para entrar hay que pasar por medio de la naturaleza, bloqueando toda vista del exterior.

En este caso fue a plena luz del día, aunque sin que nadie viera, solo escucharon. La víctima, que no ha podido ser identificada, estaba consumiendo estupefacientes en este sitio, hasta que fue interceptado por un hombre, quien le disparó en repetidas oportunidades en la cabeza, dejándolo sin vida en el acto, y escapando sin dejar rastro.

Los estruendos de bala fueron lo único que alertó a los vecinos, algunos de ellos se acercaron para ver a lo lejos un cuerpo masculino, sobre un charco de sangre. La Policía fue alertada y arribó junto con la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho), para hacer el levantamiento del cadáver.

Otros antecedentes

Apenas un día atrás, otro crimen similar ocurrió en el barrio Cerro Norte, muy cercano a Pizarro, sobre la calle 8AN, que dejó sin vida a un hombre. El pasado lunes, en las torres Los Estoraques, de la ciudadela Juan Atalaya, un cuerpo fue encontrado con varios disparos sobre un terreno baldío.

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