Un hombre identificado como Neiron Fernando Arévalo fue víctima de un ataque a mano armada que le quitó la vida momentos antes de llevar a cabo una de sus actividades favoritas, jugar pool.
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Todo sucedió minutos antes de las once de la noche del pasado jueves, 26 de junio, a las afueras de un establecimiento comercial de pool en el barrio El Líbano, donde se dio el asesinato de Arévalo, quien era conocido como el Abuelo.
El hombre llegó como parrillero en una moto blanca, en compañía de un amigo y estacionaron el vehículo. Neiron bajó del mismo y se quedó parado hablando con la persona con la que llegó, sin darse cuenta que por la espalda se le acercó un encapuchado. Todo quedó registrado en una cámara de seguridad de un establecimiento cercano.
Esta persona corrió hacia el Abuelo, desenfundó un arma de fuego y le disparó a la cabeza, que lo hizo desplomarse de inmediato. El acompañante entró al establecimiento, donde las personas que estaban jugando pool también se resguardaron, mientras el victimario escapó corriendo.
Poco a poco salieron y se echaron las manos a la cabeza al ver que ya estaba muerto. Todos salieron del pool, que cerró sus puertas por esa noche.
Al lugar llegó la Policía de Norte de Santander para atender la situación y hacer el levantamiento del cuerpo, además de revisar las cámaras de seguridad para reconstruir los hechos y tratar de dar con el paradero del responsable, que aún sigue siendo un misterio.
De igual forma, los móviles del hecho son materia de investigación, sus allegados no se explican qué pudo desencadenar este crimen contra una persona que definen como muy trabajadora y amigable, que se dedicaba a la comercialización de víveres hacia el Catatumbo.
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