Los familiares, amigos y allegados de la joven estudiante María José Estupiñán Sánchez le dieron, ayer, el último adiós a Majo, en horas de la tarde, en medio de un ambiente de tristeza y peticiones de justicia, frente a uno de los crímenes más repudiados y que mayor conmoción causó entre la población cucuteña. 

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 A las 3:00 de la tarde, inició el recorrido en la parroquia Nuestra Señora del Carmen, sobre la avenida 0, donde se ofició la misa de las exequias en honor a una hija, una hermana, una amiga, una vecina, una compañera de clases.

Cientos de personas se congregaron para acompañar a la joven y su familia, destrozada frente a este atroz hecho.

Uno de los seres queridos leyó un mensaje enviado por la hermana de Majo, quien se encuentra fuera del país, y por tal motivo no pudo hacer acto de presencia en la sentida despedida.

"Mamita, no sé en qué momento sucedió esto, no encuentro explicación. Siempre fuiste mi pequeña princesa, yo te amé. Te acompañaba a modelaje y patinaje, eras mi hermanita menor. Recuerdo cuando te cambiaba los pañales. Te convertiste en una mujer hermosa, eras temperamental, pero también eras valiente y emprendedora. Aunque te hayas apagado, en mí siempre vivirás. Solo le pido a Dios que hoy estés junto a papá", decía el mensaje.

El mismo pariente que leyó el mensaje en público, también expresó su sentir: "María José la vida para ti fue un viaje maravilloso, pero muy corto. Te fuiste a una edad muy tierna. Vuela, vuela muy alto, Majo", dijo.

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La sepultura

Una hora después, Majo fue acompañada al que será su lugar de descanso eterno. Entre lágrimas, desconsuelo e impotencia, sus familiares, amigos, compañeros y profesores de universidad, lloraban su partida, al igual que su fiel compañero perruno en los últimos años de su vida, Valentino, quien de igual forma expresaba su lamento con quejidos.

En un momento conmovedor para los asistentes, quizá al percibir el olor de la que era su dueña, Valentino, un pequeño perro blanco de raza Pomerania, en manos de una familiar, se acercó a ataúd y empezó a llorar, despidiendo a su ama.

A pocos metros del lugar, dónde estaba enterrado su padre, un espacio de tierra se abrió para recibir el cuerpo de María José. "Aquí te la entrego, José", vociferaba la mamá, entre lágrimas arrodillada sobre el pasto.

La investigación

La investigación sobre el hecho sigue su curso, y las autoridades continúan tras las pistas de los responsables de este crimen.

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De acuerdo con los avances más recientes, fuentes judiciales ponen los ojos en una expareja sentimental de María José, como el principal sospechoso del caso, por lo que se presumiría que se trate de un feminicidio.

Sin embargo, los móviles detrás del hecho siguen siendo un misterio, no solo para las autoridades, sino para la comunidad general, quienes no se explican qué podría haber derivado en este hecho de violencia. Asimismo, el clamor porque se haga justicia se incrementa con el pasar de las horas, mientras el hecho sigue sin esclarecerse.

Diferentes colectivos de la ciudad emitieron mensajes y comunicados exigiendo justicia por la muerte de Majo.

Los hechos

Sobre las 8:00 de la mañana, del 15 pasado de mayo, María José regresó a casa después de ir al gimnasio, apenas minutos después escuchó que tocaban la reja blanca de su vivienda, al salir vio a un hombre con un paquete de chocolates en la mano.

Ella recibió la caja, envuelta en una bolsa de regalo rosada que decía “love”, y según vecinos, el hombre le dijo algo, a lo que Majo respondió "oh no", lo siguiente fue el disparo que apagó la vida. El agresor escapó corriendo de la escena hacia la avenida dos, mientras la mamá gritaba de forma desgarradora: “¡No, mi hija no!”.

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Según nuevos testimonios de la comunidad, recogidos por este medio, el responsable habría dejado su motocicleta sobre esa avenida, a una cuadra y media del lugar de los hechos, y, en un momento que no quedó registrado por las cámaras de seguridad, los vecinos le habrían lanzado un ladrillo al sujeto, aunque no lograron impactarlo.

Poco después, en una camioneta llegó a la escena la que sería pareja sentimental de la víctima, quien habría quedado en shock al ver lo sucedido. Según cuentan, Majo lo habría citado para despedirse antes del viaje a Cartagena que tenía planeado.

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