

Con un país que en medio de nubarrones que ensombrecen la democracia se encamina hacia una nueva temporada electoral en 2026, el expresidente Iván Duque retomó hechos del pasado y planteó alternativas para que Colombia salga de "la horrible noche".
Eso de que Rodolfo Hernández “tiró la toalla” a última hora, dejándole el camino libre al hoy presidente Gustavo Petro, es un campanazo sobre las dudosas estrategias que no se pueden volver a repetir ni a admitir.
Esa jugada del ingeniero (q.e.p.d.), recordada por Duque en Acento, podcast de La Opinión, le dejó vía libre al progresismo con su gobierno del cambio, que en prácticamente tres años no ha cumplido sus promesas: la corrupción se ha multiplicado, la violencia está exacerbada, la Paz Total es una política moribunda, el sentimiento de la lucha de clases se ha profundizado, el déficit fiscal está por llegar a niveles históricos y un largo etcétera de hechos que causan frustración.
Entendiendo que ya no podemos seguir quejándonos sino buscar, evaluar, fortalecer y definir alternativas, una de las que debe llevarse a una necesaria deliberación es la de una coalición "vigorosa" con un gran equipo en el Congreso de la República, las instituciones y en el Poder Ejecutivo, como lo sugiere el expresidente.
Muchas de las afirmaciones de Duque coinciden con el malestar y frustración de los colombianos, por ejemplo, en que el poder presidencial "se ha convertido en símbolo de la destrucción nacional, la difamación, la persecución e intimidación".
No debe dejarse pasar por alto la advertencia del expresidente (2018-2022) cuando puso el acento en que "perdemos el país" si el actual modelo de gobierno continúa durante otros cuatro años.
Y para el seguimiento cuidadoso del comportamiento de los acontecimientos, Iván Duque dejó estas palabras relacionadas con la Corte Constitucional: "han logrado apoderarse de una parte muy importante de la Corte Constitucional, que, respetándola, ahora ya le da segundas oportunidades a los vicios de forma de las reformas".
Esta es otra voz que se une a las de otros muchos líderes que expresan preocupación por el abuso de poder y el debilitamiento institucional provocados por el irrespeto a la competencia –por ejemplo– del Congreso de la República en casos como el de la fallida Consulta Popular y ahora con la Asamblea Nacional Constituyente planteada por el presidente Gustavo Petro.
La otra conclusión que dejó Duque es que los supuestos intentos de golpes blandos y las conspiraciones para sacar al jefe de Estado denunciadas en la Casa de Nariño en realidad son una jugada del petrismo de gobernar en medio del ruido y la victimización con claras intenciones de obtener réditos electorales.
En la elaboración de un proyecto político, económico y social para la reconstrucción de Colombia, es importante reunir la mayor cantidad y variedad de insumos que sirvan de base para la consolidación democrática, dejando de lado la toma de decisiones en los asuntos de Estado por redes sociales, la restauración de la diplomacia en las relaciones internacionales, la recuperación de la economía, el recorte de gastos y sin demagogia ni fórmulas de cubilete luchar contra los violentos, el hambre, la pobreza y la desigualdad social. Y esa generación de debate y deliberación es precisamente una de las misiones de La Opinión a través de su podcast Acento.
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