Esfuerzos para mantener la tradición
En el corazón del barrio permanecía el terreno en el que antes estaba el chircal. En él no había nada, solo tierra y polvo, que, cuando soplaba el viento, se levantaba y llegaba a las viviendas aledañas.
Alexander Barrios, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC), señaló que fue por petición de la comunidad que empezaron a adelantar gestiones para construir un parque y una cancha para la recreación de niños y adultos.
Luego de varias solicitudes, lograron que la Gobernación de Norte de Santander, liderada en ese entonces por William Villamizar, adecuara el lugar y empezara a construir el espacio de esparcimiento.
“Tuvimos los papeles que certificaban que el terreno era del municipio y así logramos que vinieran a hacer esas obras”, precisó Barrios.
Día a día, decenas de niños de El Oasis dejan a un lado los aparatos electrónicos que tienen en sus viviendas y prefieren salir a jugar en el parque.
En la visita que hizo La Opinión, se evidenció la competencia de trompo que adelantaban los menores, que no superan los 10 años, mientras un grupo de adultos los miraba con nostalgia.