Los caminantes que llegaban este martes a La Parada, luego de atravesar el puente Internacional Simón Bolívar, procedentes de San Antonio del Táchira, se encontraron con la sorpresa de que algunas vallas de seguridad con el emblema de “migración Colombia” que establecían límites para el tránsito peatonal habían sido levantadas.
No solo eso, tampoco estaban las busetas que se parqueaban a su “antojo” en el sector Comercio (junto al puente) para llevar a los viajeros hacia distintos destinos, en el municipio fronterizo de Villa del Rosario o rumbo a la zona céntrica de Cúcuta.
Desde aproximadamente las 6:30 de la tarde del lunes, personal de la Secretaría de Gobierno de Villa del Rosario, en articulación con el Ejército, Secretaría de Salud y Secretaría de Familia, retiró un tramo de las barreras para iniciar un proceso de despeje, “porque en La Parada ya comenzó el cambio”.
La información fue confirmada por el alcalde de Villa del Rosario, Carlos Julio Socha, quien explicó que la acción forma parte de una primera fase que busca despejar La Parada para el Proyecto de Renovación Urbana Fronteriza.
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Dijo que entrar a ese punto de la ciudad “era terrorífico” por la presencia de los denominados “carrucheros” que abordaban a los viajeros para ofrecer el servicio de cargue de maletas, una actividad que aseguró, a partir de ahora, van a prohibir.
Además de retirar algunas vallas para mejorar el tránsito peatonal por considerar que hacían “estorbo”, reorganizaron los paraderos ilegales que los choferes habían formados a los alrededores del puente y solo dejaron dos líneas debidamente establecidas, la de la zona urbana de corta distancia y la que cubre la ruta Villa del Rosario-Cúcuta.
Según relató, el transporte “pirata” de pasajeros era uno de los problemas más recurrentes en ese espacio. “Eso estaba por todos de La Parada, había busetas en la avenida, en las calles, en los cruces de las calles, entonces no, organizamos los paraderos para que el transporte formal pueda prestar su servicio porque eso era un desorden total”, comentó el alcalde.
Aclaró que las vallas de migración no serán retiradas en su totalidad, aunque apartaron la mayoría para determinar cuántas quedarán, una parte para el Centro Nacional Fronterizo (Cenaf) y otras para el paso de entrada a Colombia.
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Esta decisión también forma parte de la política local de preparación para la reapertura de la frontera, propuesta por el presidente electo Gustavo Petro. “Estamos esperando esa reactivación económica como se hacía hace siete años sin ningún contratiempo, que pueda pasar cualquier vehículo particular, de transporte o de carga, ya que el nuevo presidente dice que vuelven las relaciones diplomáticas”.
Más Ejército
El alcalde, Carlos Socha, anunció que hoy (miércoles) viajará a la ciudad de Bogotá para solicitar ante el Ministerio de Defensa un pie de fuerza permanente del Ejército que brinde seguridad en La Parada durante por los menos seis meses, tiempo en que estiman podrán poner todo en orden.
Así mismo, pedirán el apoyo del General Óscar Antonio Moreno Miranda, director de la Policía Metropolitana de Cúcuta, para aumentar la presencia policial en la zona fronteriza.
“De igual manera voy a contratar más agentes de tránsito para ponerle orden al transporte y recuperar el espacio público que está todo invadido”, declaró el mandatario local.
La idea es que en el sector Comercio no quede ni un solo vendedor ambulante. Mientras recuperan el área, serán reubicados en unos módulos o quioscos. “Esperamos que todo quede organizado mientras hacemos el proyecto de renovación urbana. Debe despejarse La Parada completamente y ahí no puede quedar nadie que no esté haciendo la comprar en los locales comerciales”, aseguró.
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