En dos operaciones distintas cayeron, esta semana, dos señalados cabecillas del Clan del Golfo en los departamentos de Chocó y Córdoba.
El primero de ellos es Nelson Enrique Zapata, conocido con el alias de “Calvin Clein”, y quien sería el segundo cabecilla del frente Carretera, que delinque en Chocó.
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El hombre fue capturado en vía pública del municipio de Mutatá, en el Urabá antioqueño, en el marco de la operación “Dromos VI” de la Policía, gracias a la información suministrada por fuentes humanas.
De acuerdo con las autoridades, “Calvin Clein” viajó desde el municipio de Istmina (Chocó) hacia Medellín y posteriormente se desplazó a Mutatá, con el fin de adelantar una reunión con “Chiquito Malo”, el máximo jefe de la organización, en la que discutirían estrategias para fortalecer la estructura criminal en el Chocó.
Las fuentes humanas le indicaron a las autoridades que “Calvin Clein” estaría solo porque le habían ordenado moverse sin escoltas, lo cual fue aprovechado para dar con su captura en una del casco urbano de Mutatá.
“Calvin Clein” asumió como segundo cabecilla del frente Carretera en octubre de 2021, tras la captura de alias “Ómar”.
“Este es un golpe certero al crimen organizado, alias Calvin Klein es quien venía coordinando la comisión de homicidios selectivos y escenarios de confrontación en la región del San Juan, en Chocó, contra el Eln, situación que provocó el confinamiento de 26 comunidades étnicas especialmente en el municipio de Nóvita”, comentó el general Gustavo Franco, comandante de la Región 6 de la Policía.
El accionar criminal de “Calvin Clein” afectaba en gran medida a las comunidades de los municipios de Istmina, Nóvita, Condoto, Lloró, Unión Panamericana y Quibdó, en Chocó.
También está relacionado con las extorsiones, homicidios, narcotráfico, confrontaciones armadas en Quibdó y atentados en contra de miembros de la Fuerza Pública en la ciudad.
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El capturado, además, fue el encargado de coordinar el paro armado en el Chocó que el Clan del Golfo adelantó en 11 departamentos, tras la extradición de Dairo Antonio Úsuga (“Otoniel”).
“Calvin Clein” era requerido por las autoridades por el delito de concierto para delinquir agravado. Fue enviado a la cárcel en las últimas horas, tras finalizar la audiencia de control de garantías.
“Mascachicle” fue abatido en Montelíbano
Además de “Calvin Clein”, la Policía dio otro duro golpe al Clan del Golfo en las últimas horas, tras confirmarse que José Pérez, alias “Mascachicle”, cabecilla del frente Rubén Ávila Martínez, fue abatido en una operación en zona rural del municipio de Montelíbano, Córdoba.
La Policía había lanzado dos operaciones anteriores en contra de este personaje, pero se había logrado fugar y finalmente cayó, luego de una operación entre comandos de la Policía con el apoyo de las Fuerzas Militares, mientras jugaba billar en un establecimiento de la vereda San Francisco del Rayo, de Montelíbano.
“Mascachicle” era uno de los hombres de confianza de alias “Mau”, principal cabecilla del Clan del Golfo en Córdoba, y fue quien ordenó la tortura y posterior ejecución del subintendente Milton Florez y el patrullero Leonardo Bustamante, adscritos a la Dijín, el 24 de octubre de 2020 en Montelíbano.
“Hoy debemos anunciar al país, a su familia y a sus compañeros, que el asesino y determinador de los dos hechos criminales que cobraron la vida de los dos policías fue abatido por la acción de la Policía (...). En dos operaciones anteriores hechas a alias ‘Mascachicle’, se había logrado escapar, pero no hay una mala tercera vez y se logró su neutralización”, comentó el general Franco.
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Con 13 años de trayectoria criminal, “Mascachicle” tenía azotados con extorsiones y homicidios selectivos a los habitantes del sur de Córdoba. Así mismo, era el encargado de difundir las diferentes ideologías del Clan del Golfo, tanto a los integrantes de la organización como a los habitantes de la región.
Además, se encontraba adelantando actividades propagandísticas para el reclutamiento de nuevos integrantes entre los municipios de Montelíbano, Puerto Libertador y Planeta Rica, en Córdoba.
Este cabecilla tenía vigente una orden de captura por los delitos de homicidio agravado y concierto para delinquir. Durante la operación que permitió su neutralización, fue incautado un revólver calibre 38 con cuatro cartuchos y dos vainillas.
