Ni adelantar la elección de la nueva mesa directiva varios meses más de lo normal, ni ausentarse de las últimas sesiones plenarias para evitar fugas en el grupo, le sirvió a la coalición que hasta hace unos días habían armado 10 concejales, entre ellos varios de los más cercanos a la administración municipal, para sellar su objetivo de quedarse con la presidencia de la corporación en 2022.

Gracias a lo que se podría considerar como una jugada política “maestra”, el bloque minoritario, conformado por Leonardo Jácome, Jair Díaz, Nelson Ovalles, Carlos García Alicastro, Álvaro Raad, Juan Diego Ordóñez, Albert Casadiego, Alexander Salazar y Oliverio Castellanos terminó a última hora inclinando la balanza a su favor y dándole la vuelta a una elección que se alcanzó a creer definida en favor de los intereses del concejal Jorge Acevedo, principalmente.

Como pocas veces ocurre en el Concejo, los Partidos Conservador y Cambio Radical resolvieron aplicar la Ley de Bancadas para la elección de mesa directiva y de esta manera echaron al traste los planes que hasta el sábado tenía el grupo de los 10.

Y es que, por cuenta de esta decisión, el concejal conservador Carlos Luis Chacón se quedó sin la posibilidad de respaldar al candidato que impulsaba su coalición: Edinson Contreras, de Todos por Cúcuta.

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Lo anterior, puesto que sus compañeros Juan Diego Ordóñez y Leonardo Jácome anunciaron su voto en favor de Oliverio Castellanos y al ser mayoría, la Ley les obligaba a actuar en grupo, razón por la cual a Chacón no le quedó de otra que darle su voto al electo presidente de la corporación (Castellanos).

Esto dejó, entonces, sin opción la candidatura de Contreras, quien al final terminó no aceptando su postulación, pues ya era un hecho que no iba a contar con los votos necesarios para llegar a la mesa directiva.

Cambio Radical, que ya tenía su bancada completa (Nelson Ovalles, Albert Casadiego, Carlos García Alicastro y Oliverio Castellanos) comprometida con la elección de Castellanos, decidió asegurarse de que una movida de última hora no le fuera a cambiar los planes y por eso también pidió autorización para aplicar la Ley de Bancadas.

Dicha norma señala que: “Los miembros de cada bancada actuarán en grupo y coordinadamente, y emplearán mecanismos democráticos para tomar sus decisiones al interior de las corporaciones públicas en todos los temas que los Estatutos del respectivo Partido o Movimiento Político no establezcan como de conciencia”.

Al final, de tener solo nueve votos a su favor, Oliverio Castellanos terminó con 14, puesto que ya sin candidato, otros cuatro concejales optaron por seguir el mismo camino de Carlos Luis Chacón y le dieron su apoyo. Los cinco votos restantes fueron en blanco.

El mismo Chacón logró, posteriormente, alzarse con la primera vicepresidencia, gracias al respaldo de 15 de sus compañeros. Guillermo León Báez, del Partido de la U, se postuló, pero solo obtuvo tres votos. El otro voto fue en blanco.

Como segundo vicepresidente fue elegido para el próximo año el liberal Alexander Salazar, quien llegó recientemente al cabildo, en reemplazo de Alejandro Castellanos. El corporado recibió 12 votos, contra seis de León Báez y uno en blanco.

El concejal de la Alianza Verde Edward Varón, quien hacía parte del bloque de 10, junto a Edinson Contreras, Edwin Duarte Gómez, Jorge Acevedo, Víctor Caicedo, Carlos Alberto Dueñas, Jesús Alberto Sepúlveda, Carime Rodríguez, Guillermo León Báez y Carlos Luis Chacón, terminó votando en blanco en las tres elecciones y aseguró que no estaba dispuesto a seguir respaldando el continuismo.

Esta es la primera vez, desde que está en el Concejo de Cúcuta (2012), que Oliverio Castellanos ocupa la presidencia de la mesa directiva. En otros años estuvo como primero y segundo vicepresidente.

“Esta es una oportunidad de trabajar por la ciudad de la mano de la administración municipal y el alcalde, para lograr consolidar esos proyectos que se han venido trabajando y que quedaron plasmados en el Plan de Desarrollo Municipal”, manifestó Castellanos tras su elección.

Jorge Acevedo, el principal perdedor

La elección de la nueva mesa directiva para el próximo año además de dejar al bloque de Jácome, Díaz, Ovalles, Alicastro, Raad, Ordóñez, Casadiego, Salazar y Castellanos, como los grandes ganadores de la jornada, pues lograron imponerse a última hora, después de haber sido minoría, también dejaron un claro perdedor: el concejal Jorge Acevedo.

Varios de sus compañeros coinciden en que el excandidato a la Alcaldía de Cúcuta fue quien impulsó la idea de anticipar la escogencia de los directivos sin ninguna explicación, pues por lo general esta es una decisión que se toma en el último periodo del año, es decir, entre octubre y noviembre. Su propósito, señalan, era asegurar a uno de los miembros de su partido Todos por Cúcuta en la Presidencia y fue así como postuló el nombre de Edinson Contreras.

La idea de Acevedo era aprovechar que en los últimos meses se había logrado consolidar una coalición mayoritaria al lado de Contreras, Duarte, Caicedo, Dueñas, Sepúlveda, Varón, Rodríguez, León Báez y Chacón. Sin embargo, sus planes no resultaron como esperaba.

“A raíz de esa decisión de Acevedo hubo tensión y se da una serie de provocaciones políticas al interior del Concejo que se empiezan a mover. Ahí es cuando entra Oliverio como posible candidato a la Presidencia y termina imponiéndose por muchas razones”, aseguró un concejal.

Algunos coincidieron también en que no se entendía cómo ni por qué razón, la mayoría de concejales que ha respaldado al alcalde Jairo Yáñez estaba en función de la candidatura promovida por Acevedo, cuando él ha sido un abierto opositor del mandatario y defensor de la revocatoria.

Lo cierto es que, tras la elección de ayer, no hay certeza de cómo se redistribuirán en adelante las fuerzas políticas al interior de la corporación y si habrá recomposición de coaliciones para lo que resta del actual periodo y del año.