Luego de la operación realizada por la firma Vital Medical Care (Vimec), para atender los casos especiales durante la pandemia, el manejo de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) pasará directamente a manos del Hospital Regional Emiro Quintero Cañizares de Ocaña.
Así lo dio a conocer el gerente de la Empresa Social del Estado, Elmer Tamayo Jaime, quien hace los ajustes para ampliar la cobertura y atender a más de 350 habitantes de la provincia de Ocaña y zona de influencia.
“Teníamos la UCI en un apoyo tecnológico mediante un contrato sin riesgo compartido para el hospital hasta el día 22 de septiembre y ahora comienza la operación propiamente dicha para el centro asistencial. Ya no hay socio, el ciento por ciento es del hospital de Ocaña”, recalcó.
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El funcionario direccionó los procedimientos básicos para mejorar los servicios y anunció la adecuación de las instalaciones en aras de fortalecer el nivel de complejidad evitando la remisión de pacientes hacia otras regiones del país.
A tono con los avances de la medicina
El objetivo de los avances significativos con las mejoras en la infraestructura es garantizar un tratamiento adecuado a los pacientes del centro asistencial.
Contar con espacios en condiciones óptimas y las conexiones de redes de gases y suministro de todos los insumos con los servicios transversales para el complemento de los servicios.
“Se reinician labores con una capacidad instalada de 26 camas, 10 para la sección de adultos, 12 neonatales y 4 en la parte pediátrica”, indicó el coordinador de la UCI, Albeiro Moreno.
Resaltó la reactivación de la Unidad con el firme propósito de ofrecer el portafolio de servicios médicos de alta calidad con infraestructura adecuada, personal capacitado e idóneo en aras de un tercer nivel de complejidad respondiendo a las necesidades de la región.
La puesta en marcha de la UCI bajo las intervenciones directas del hospital permitirá optimizar la atención garantizando un servicio oportuno y seguro para todos los pacientes.
“El centro asistencial vela por la protección social de la provincia de Ocaña y subregión del Catatumbo y en tal sentido se trabaja para adecuar las instalaciones a las crecientes exigencias”, precisó Tamayo.
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Además, indicó que la unidad básica del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses puede permanecer en el hospital hasta enero y en ese espacio se procederá a la ampliación de la sección de urgencias.
Dos años de antelación
El Hospital Regional Emiro Quintero Cañizares fue sometido a una intervención por parte de la Superintendencia Nacional de Salud y se debía avisar con dos años de antelación el traspaso de la UCI al centro asistencial.
El ex agente, Víctor Pedraza López dejó muy claros los términos del contrato de riesgo no compartido, cuya cláusula determinaba que la unidad en septiembre de 2024 debía pasar a manos del hospital.
Dos años antes había que dejar la manifestación por escrito de si el contrato iba a continuar o culminar, donde todos esos equipos dados por el tercero pasarían al centro asistencial.
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Durante su gestión se hizo efectivo el cumplimiento de las cláusulas del contrato con Vimec, donde a través de un escrito se dejó en firme que el hospital no estaba interesado en dar continuidad a la prórroga cumpliendo los dos años pactados y esa UCI en el año 2024 ya tendría que pasar directamente a manos de la Empresa Social del Estado.
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