Lo último que supieron los familiares del joven Jhonatan Santiago Urrea fue que regresaba a casa después de asistir a clases en la Institución Educativa Francisco Fernández de Contreras, pero en el camino se le atravesó un carro gris, que lo habría secuestrado hacia un rumbo desconocido.
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De su paradero no se sabe nada a cierre de esta edición, pues el hecho se habría cometido en la noche del pasado miércoles, 20 de agosto, en el sector El Carbonal, en la zona rural de Ocaña. En una cámara de seguridad de la zona quedó registrado el momento en el que pasa Jhonatan por el camino, y minutos después como se regresa el carro en el que lo llevarían.
El hecho fue notificado a las autoridades, que empezaron su búsqueda en esa misma noche, y que pronto dio un resultado, pues allí encontraron la motocicleta blanca en la que se movilizaba el joven, aunque sin rastro de él.
La siguiente pista la encontraron ayer, pues en la vía hacia Convención, hallaron un carro incinerado, que presuntamente fue el utilizado para el secuestro. Las autoridades creen que por el rastro dejado, el joven fue llevado hacia el Catatumbo, sin embargo, no se maneja ninguna hipótesis del motivo detrás del hecho.
Se conoció que el joven y su familia habían llegado a Ocaña este año, precisamente desde el Catatumbo, mientras el hermano de Jhonatan estudia en la universidad, el joven cursa décimo grado en el colegio.
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