La señal que emitió un localizador oculto en una camioneta marca Dimax, de placas ELU-284, que le robaron a una empresa, en marzo de este año, les permitió a las autoridades recuperarla y capturar a cuatro presuntos delincuentes que iban a bordo del vehículo.

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El operativo se dio el lunes, cuando los propietarios de la camioneta se percataron de que estaba en movimiento entre Tibú y El Tarra, por lo que de inmediato alertaron a la Policía de Norte de Santander, para que pudiera rastrearla.

“Los delincuentes, que serían integrantes de la disidencia de las Farc, fueron tan descarados que solo le quitaron la placa delantera a la camioneta y no se percataron de que tenía un GPS oculto que siempre marcó la ubicación”, indicó una fuente judicial.

Rápidamente varias unidades de la Policía y del Ejército se desplazaron por la carretera donde les habían indicado que estaba la camioneta, pero cuando estaban cerca del vehículo se percataron de que se estaba devolviendo para el casco urbano de Tibú.

“Al parecer, los bandidos se dieron cuenta de que los estábamos siguiendo junto con el Ejército y decidieron regresarse para el pueblo. Sin embargo, nosotros ya habíamos activado el ‘plan candado’ y teníamos varias unidades cerca para agarrarlos en el momento en el que intentaran huir”, contó la fuente.

Los delincuentes alcanzaron a llegar hasta el frente de la estación de Policía de Tibú, donde unos uniformados les hicieron la señal de pare, pero en ese momento por poco son atropellados.

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Mientras los policías esquivaban el vehículo, otras patrullas llegaron al lugar y se inició una persecución, desatándose una balacera durante al menos cinco cuadras, hasta que finalmente, en el barrio El Carmen, el conductor perdió el control y chocó contra un árbol, por lo que en ese momento fueron rodeados por las autoridades.

Luis Orlando Valencia Arango, Frankli Navarro Navas, Rafael Cañas Chávez y Wilson Botello Páez fueron detenidos por hurto y porte ilegal de armas, por lo que quedaron a disposición de la Fiscalía y luego de ser presentados en audiencias concentradas, un juez los envió a la cárcel.

Dentro de la camioneta encontraron dos pistolas marca Glock, cinco proveedores, 15 cartuchos, dos celulares y 10 cartillas con propaganda alusiva a la disidencia de las Farc.

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