Los más de siete videos que han sido compartidos este año en redes sociales por la disidencia del Frente 33 de las Farc, humillando a jóvenes con carteles y trabajos forzosos, por ser supuestamente drogadictos o ladrones, fue uno de los motivos para que las autoridades adelantara una investigación para dar con el paradero de las víctimas, pues algunas llevan meses sin contactarse con sus familiares.
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Por esa razón, cuando el Ejército, junto con la Fuerza Aérea, conoció que una vivienda ubicada en la vereda Los Robles, en El Tarra, presuntamente tenía municiones y algunos secuestrados, coordinó con la Policía de Norte de Santander y la Fiscalía para obtener una orden de allanamiento y hacer un operativo.
Gracias al fuerte material probatorio, la orden no duró mucho tiempo en ser emitida por un juzgado y el domingo en horas de la mañana ejecutaron el operativo.
“Según las investigaciones de inteligencia militar, en esa casa el GAO-r 33 (disidencia del Frente 33 de las Farc), guardaban armamento que era utilizado para cometer homicidios y podrían estar retenidas y explotadas laboralmente personas que fueron señaladas de ser consumidoras”, confirmó el general Omar Sepúlveda, comandante de la Segunda División del Ejército.
Al llegar, los soldados no encontraron a ningún integrante del grupo armado, solo estaban los cuatro retenidos, junto con armamento y una cantidad considerable de explosivos. Los hombres fueron trasladados a una base militar para conocer su estado de salud, mientras que las municiones y explosivos fueron decomisados.