La selección femenina Sub-13 de Norte de Santander está entre las ocho mejores de Colombia.
Así es, el conjunto nortesantandereano a falta de una fecha por disputarse del Zonal Nacional de la categoría que se cumple en Sincelejo, venció este viernes 2-1 a su similar de Atlántico con anotaciones en el segundo tiempo de Mariangel Vera (42’) y de Brithney Sharith Suescún (54’).
Con este resultado Norte tiene 7 puntos, Córdoba, que descansó suma 4 puntos, y en el cierre jornada Santander empató 1-1 frente a Sucre, e igualan a las cordobesas en puntos.
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Las atlanticenses se habían adelantado al (35’pt) con un gol de media distancia de Valentina Córdoba, pero las rojinegras en la etapa complementaria reaccionaron de entrada y consiguieron rápido el empate, en un partido que fue parejo donde los equipos generaron peligro sobre las dos áreas.
Finalmente las rojinegras salieron airosas y por primera vez se clasifican la gran final nacional que tiene previsto jugarse a fines de mayo en sede por definir.
En la última jornada que se disputará este domingo, las motilonas cerrarán su participación frente a Santander, con el clásico regional.
Pase lo que pase en ese encuentro las nortesantandereanas ya tienen su puesto asegurado en la final y las otras dos casillas se la pelearan entre Córdoba, Sucre y Santander.
A las cordobesas y sucreñas les bastará la derrota de Santander en el clásico del regional del oriente para avanzar a la final.
En su defecto en caso de un triunfo de Santander, uno de los equipos de la costa se quedará en el camino.
En la primera fecha Norte igualó (1-1) ante Córdoba, en la segunda, derrotó al local Sucre (1-0) y ahora se deshizo de Atlántico.
Trabajo silencioso
Las motilonas dirigidas por el técnico André Pérez, con la asistencia de Wendy Tarazona, llegaron al torneo con perfil bajo sin crear demasiadas expectativas y a medida que pasaron los partidos fueron creciendo, al punto que con ganas, pundonor y garra se clasificaron a la siguiente ronda.
Sobre esta histórica clasificación el entrenador Pérez dijo que “gracias a Dios, y al Señor de los Milagros (de Buga), que nos ilumina, nos ha puesto en el camino este grupo de deportistas, a los padres de familia, a los directivos que han abanderado este proyecto, que a buen término, partido a partido, pudimos ir cosechando los resultados que necesitamos y demostrarle a la gente de Norte de Santander que el fútbol femenino existe, y que dará resultados si seguimos trabajando de la mano entre todos”, afirmó el técnico.
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Si en el torneo los llegaron a ver como favoritos, André manifestó que eso se lo hicieron notar los otros entrenadores, pero él lo tomó como un cumplido.
“Teníamos que venir a jugar con humildad a demostrar el trabajo que se viene haciendo”.
Del mismo modo manifestó que todas las selecciones tienen su nivel e imagen de otros torneos.
“Córdoba viene de jugar tres finales del Baby Colanta, es de proceso, Sucre cuenta con un gran apoyo, y qué decir de Atlántico y Santander.
Las santandereanas vienen de ser de la Copa Colanta. Entendíamos que había que luchar contra todo eso y que la única manera de hacerlo era con disciplina, humildad, trabajando minuto a minuto sin dejar nada al azar”, aseveró Pérez.
André remarcó que desde que llegaron a Sincelejo el objetivo era sacar los dos primeros partidos adelante y ahí sabría qué rumbo tomar para soñar con el avance a la siguiente fase del campeonato.
“Hoy era nuestro día, no podíamos dejar nada para la última fecha. No queríamos que se nos quemara el pan en la puerta del horno y queríamos enfrentar el clásico ante Santander con tranquilidad y pensar en ganarle a nuestro rival vecino”, subrayó el técnico de las rojinegras.
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