Tres de tres, el Cúcuta Deportivo sigue sumando en la Liga Águila 2019 y es el líder provisional del rentado nacional. 

Desde el 2013 (9 de noviembre),  cuando venció al Atlético Nacional por 1-2, el equipo de la frontera no ganaba de visitante en la primera división colombiana; y lo hizo este miércoles, precisamente ante Santa Fe, equipo al que nunca había vencido en su propia casa. Con un contundente 1-2, los de la frontera rompieron ese invicto mano a mano a favor de los bogotanos (7 derrotas y 2 empates) para seguir escribiendo una historia llena de victorias, que se viene agrandando desde la temporada pasada.

Con un gol de Luis Miranda y un autogol de Nicolás Gil, el equipo rojinegro pudo celebrar su segunda victoria consecutiva, sumando así seis puntos que le permiten seguir alimentando el sueño de volver a salir campeón.    

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Duro arranque, pero buenos referentes

Como no podía ser de otra forma, el equipo de la frontera se vistió, ayer, de valor para enfrentar a uno de los conjuntos fuertes de la Liga Águila. El grupo dirigido por el argentino Sebastián Méndez saltó al césped del Nemesio Camacho ‘El Campín’ con toda la intención de volver a sumar tres puntos. 

Los primeros 10 minutos de juego se convirtieron en una seguidilla de intercambios ofensivos, en los que el once motilón presionó con más eficacia en el campo capitalino. 

En el elenco rojinegro se hacía presente un nerviosismo (normal) por el que era su primer juego de visitante en la máxima categoría del fútbol profesional colombiano, en 2019,  y aunque la hinchada no acompañó a los ‘leones’, la presión se sentía. Sin embargo la respuesta cucuteña  no pudo ser mejor. 

Con el comando en el medio campo por una dupla conformada por el vallecaucano Diego Chica y del argentino Matías Pérez, el Cúcuta Deportivo generó constante peligro ante los capitalinos. 

Chica, que en febrero cumplirá 37 años, y que en la temporada pasada fue el gran referente del medio campo, encontró en Pérez un perfecto aliado para imprimirle aún más dinamismo al equipo fronterizo. Los dos jugadores, tanto en el de ayer como en el partido del pasado domingo frente a Rionegro en el estadio General Santander (3-0), han tomado el timón de un barco que, tras dos fechas en la Liga, ya navega por buenas aguas. Reparten juego a los dos costados de la cancha, pero lo mejor es que tienen punteros realmente efectivos como lo son el antioqueño Jonathan Agudelo y el Sub-20 Luis Miranda para descargarles la pelota con confianza.

La calidad de juego en los pupilos del ‘Gallego’ Méndez se ha notado, y en la merecida victoria de ayer salió a relucir el trabajo de un plantel que viene con toda la base de la temporada pasada. En general, fue una merecida victoria para el Cúcuta Deportivo, que se enfrentó a un equipo cardenal que respondió, pero que no estuvo a la altura de los visitantes.

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Oportunidades sin concretar

Una de las oportunidades más claras que tuvo el once motilón llegó al minuto 27 de primer tiempo. El goleador Agudelo, que es un exjugador de Santa Fe, desbordó por la banda izquierda luego de un pase filtrado, y logró rematar a puerta un balón que impactó en el ángulo del portero Geovanni Banguera. Por poco significó el gol para abrir el marcador. 

Luego de eso, la tribu fronteriza se llegó a apoderar del balón, y por medio de transiciones rápidas se fue tomando confianza. Santa Fe quiso responder (44’) por medio de su atacante estrella Johan Arango, pero la defensa rojinegra se mostró férrea y sin fisuras. 

Llegó la celebración

Con un primer tiempo finalizado con el marcador en 0-0, los equipos ingresaron al campo de juego con hambre de sacudir los números. No obstante, fue el Cúcuta Deportivo el encargado de celebrar primero. 

Sobre los 46’, los dirigidos por Méndez cambiaron la pizarra tras una jugada elaborada por el sector izquierdo por cuenta de Agudelo. El antioqueño sirvió un balón al corazón del área, y finalmente acabó en un autogol de Nicolás Gil.

El cuadro capitalino supo responder a la ventaja rojinegra con un gol de penalti sobre los 49’. Luego de una mano cometida por Mauricio Duarte en el área motilona, fue Arango el encargado de ejecutar, y Chaverra no pudo evitar el empate (1-1).

Ya cuando el juego se empezaba a tornar más lento, y la altura bogotana pasaba factura, apareció Luis Miranda para aclarar el panorama (74’). El jugador de 21 años recibió un balón del recién ingresado John Hernández y sacó un ‘bombazo’ para sentenciar un partido que puso a celebrar a la hinchada motilona en la distancia.