Los vecinos implementan jornadas de limpieza y poda para mantener el espacio en buenas condiciones, pero todavía esperan a que un futuro se logre convertir en una cancha de tableta o polideportivo.
Según manifestó uno de los fundadores, tuvieron la iniciativa de construir una capilla en esa zona, pero no fue posible la ejecución porque estaba destinado para la construcción de un espacio social o recreativo. Además, en alusión al significado del nombre de la urbanización, prefirieron mantener a Portachuelo como un barrio pequeño.
Los problemas se huelen en Portachuelo
Desde su fundación, los vecinos han tenido problemas con un caño ubicado a un costado de la urbanización que ha provocado inundaciones en las temporadas de lluvias, y en la actualidad, aún sigue ocurriendo, pero se adicionaron los malos olores que genera.
La comunidad cuenta que, en sus inicios, los niños debían subirse a la reja de la universidad para llegar limpios a la escuela debido a que el agua sobresalía del caño y su abundancia no le permitía ser filtrada por las alcantarillas.
Jesús Escalante, vecino del sector, comentó que es constante la expulsión de estos olores dado que la estructura del canal está bastante dañada y obstaculiza la circulación del agua, también, agregó que la población que vive a metros del caño arroja basuras y empeora la situación.