La deforestación en el departamento ha ido en aumento durante los últimos años, con más de 55.000 hectáreas de bosque perdido, por ello ha sido importante fortalecer la gobernanza y el manejo forestal, a través de procesos de desarrollo de economía forestal y cierre de la frontera agropecuaria, temas a los que la Gobernación y Corponor como autoridad ambiental, le hacen seguimiento.
A la fecha estas estrategias de manejo y protección forestal han tenido una inversión de más de $27.000 millones para asistencia alimentaria y sustitución de cultivos, más de $93.000 millones en proyectos productivos, con los cuales se han beneficiado más 5.600 familias, que han podido hacer parte del plan de sustitución de cultivos.
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La ingeniera forestal de la Dirección de Bosques y Servicios Ecosistémicos del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, María Natalia Arias, expresó que el fenómeno de la deforestación está afectando principalmente los bosques del departamento, especialmente en el municipio de Tibú y puntualizó lo siguiente:
“No sólo tiene un impacto a nivel social, sino también a nivel social y económico de todas estas regiones, por lo cual es importante definir y ejecutar acciones que puedan mitigar no sólo el cambio de las coberturas afectadas, sino también brindarle a todas las comunidades alternativas para seguir subsistiendo sin recurrir a las actividades ilícitas que son las que principalmente están afectando los bosques de la región”.
Para disminuir el impacto causado por la deforestación en necesario conocer el territorio, desde las necesidades de su comunidad, como las ambientales, de está forma será posible y viable mitigar las problemáticas, especialmente en el Catatumbo, que históricamente ha sido una zona donde predominan los cultivos ilícitos.
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Por otro lado, según el Informe Nacional de Deforestación, Norte de Santander es el sexto departamento con mayor deforestación a nivel nacional, con tendencia ascendente, siendo Sardinata, Teorama, Convención, El Tarra, Cúcuta y Tibú, los municipios donde se concentra la mayor problemática. Además, de Toledo, donde han comenzado a aparecer registros.
El funcionario de Corponor adscrito a la subdirección de Recursos Naturales, Emilio Jaimes, habló sobre las acciones que la Corporación adelanta frente a este tema. “De acuerdo con el plan institucional se está diseñando una estrategia para el control, la cual enmarca un eje importante que es el monitoreo, que se realiza con el aval del Ideam, esta información se da a conocer a los entes territoriales donde se presenta la problemática, para que ellos en conjunto con todos los actores involucrados tomen las decisiones más acertadas para detener y controlar la deforestación”.
Finalmente, se concluyó que además de ser pertinente, es una obligación que los entes territoriales y actores involucrados, participen en este tipo de eventos, porque el Sistema Nacional Ambiental existe, pero necesita la presencia de las administraciones y de la institucionalidad para que acompañen y apoyen los procesos ambientales desde los territorios.
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