Facebook explicó lo sucedido en la tarde del lunes 4 de octubre cuando sus plataformas sufrieron un apagón mundial por más de cinco horas. Según la compañía, la falla se derivó a un cambio en la configuración de los enrutadores troncales que coordinan el tráfico de red. En otras palabras y como muchos expertos lo catalogan, fue debido a un error humano.
Tras esta última declaración, a muchas personas le generó duda la posibilidad de un mal manejo en la configuración. Sin embargo, una de las afirmaciones es que no se trató de un ataque al sistema, sino que fue una falla interna de la empresa.
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Es así como las primeras hipótesis hablan de un error donde el servidor no estaba respondiendo a las solicitudes que se le estaban haciendo, lo que hizo que muchos usuarios se cambiaran de plataforma a otras como Telegram, Twitter o Snapchat.
“Las demás redes sociales se vieron afectadas pues se extendió la capacidad que soportaban y hasta presentaron intermitencias por el pico de usuarios que comenzaron a usarlas. Esto pudo aumentar la pérdida de confianza en Facebook y el empezar a utilizar otras, no tan desarrolladas y no tan seguras, puede ocasionar la pérdida de los datos que se proveen para tener acceso en un momento de urgencia”, afirma Eduardo Peñaloza, ingeniero técnico de clientes en Netdata.
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En cuanto a las consecuencias económicas expertos estiman que se perdió en costos operativos 1.600.000 millones de dólares y en costos totales, incluyendo la bolsa y la reputación de Facebook, casi 6 billones de dólares. Y es que el impacto se vio reflejado en la bolsa de valores. “La acción pasó de costar 344 a 323,13 dólares. Bajó un 25% de su precio en una hora. Una baja que ocurrió por estar siete horas sin servicio”, añadió Peñaloza.
Así mismo, reputacionalmente Facebook ya estaba en la cuerda floja por los rumores de la exempleada Frances Haugen en donde declaró que, por negligencia, los datos personales de 1.500.000 usuarios habían sido expuestos al público en un tablero donde interactuaban hackers. “Lo de esta semana, parece una casualidad, pero en los negocios esas casualidades se usan muy bien”, aseguró el ingeniero en Netdata.
Ahora es posible que las autoridades en Estados Unidos abran investigaciones apenas se resuelva el problema por completo, pues siempre investigan la causa raíz de todo lo ocurrido: si fue una negligencia humana o si fue un ataque, más aún después que se conociera que ni los mismos empleados de la multinacional pudieron entrar a los data center a intentar solucionar los inconvenientes, pues la base central funciona con (Internet de las cosas) IoT y esta no funcionó tampoco, lo que terminó por desencadenar una serie de consecuencias que prolongó la caída de sus plataformas.
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Por último, sobre los temas de seguridad, especialmente en WhatsApp, está por determinarse si hubo peligro de fuga de información por la encriptación de los mensajes. Es por esto por lo que, diferentes comerciantes y emprendedores que trabajan por medio de esta red social migraron a otros canales de comunicación. Sin embargo, esto no sustituyó la pérdida en ventas y atención al cliente.
