Boconó, un extenso sector que está en los límites entre Cúcuta y Villa del Rosario, además, de ser fronterizo con Venezuela, sigue siendo un escenario de muerte. En lo corrido de este año, se han registrado al menos una docena de asesinatos, sin que hasta el momento se conozca algún resultado de las investigaciones que adelantan las autoridades judiciales.
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En los últimos tres días, se han encontrado los cadáveres de dos hombres. Una de las víctimas fue identificada como Jean Pierre Castro, pero la segunda no pudo ser reconocida, pues el cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición.
Y es que uno de los principales problemas que tiene esa zona, según las autoridades, es que hay muchos pasos informales fronterizos, donde la vigilancia de la Policía es muy poca, siendo aprovechado esto por los grupos armados ilegales y bandas delincuenciales.
El hecho más reciente
Y precisamente, en una de esas trochas de la frontera que conecta con Boconó fue donde el martes 19 de julio algunos migrantes que venían desde Venezuela se dieron cuenta de que había un cadáver flotando en un ‘brazo’ del río Táchira, pero aunque alertaron a las autoridades, nadie quiso llegar hasta allá, alegando seguridad, pues en ese sector se la pasan varios hombres del Eln cobrando la ‘vacuna’.
Además, la Policía sostuvo que el cuerpo se encontraba en territorio venezolano, según las coordenadas de GPS.
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Algunas personas aseguraron que el fétido olor que salía de ese lugar y un gran número de aves de carroña fue lo que ayudó a que se descubriera el cadáver.
Ante la negativa de las autoridades para llegar al sitio donde se encontraba el cuerpo en descomposición, el jueves en la tarde, los empleados de la funeraria Nuestra Señora del Carmen se encargaron de ir a recogerlo y trasladarlo hasta las instalaciones de Medicina Legal para que le hicieran la respectiva inspección técnica.