Con elegancia y firmeza, al frente caminan los batuteros que guían con su batuta al grupo con precisión. Le siguen las dulces liras, las cuales con sus melodiosas notas elevan las emociones de los presentes. En la marcha, prosiguen los platillos con su brillo metálico acentuando cada sonido. Las timbas y redoblantes hacen retumbar y dan alegría en cada paso al andar. Los bombos con su fuerza marcan con un latir la fuerza de la música; y las poderosas cornetas anuncian la grandeza de la banda.
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Cada sección de las bandas marciales de paz impregnó un sentimiento y una voz que resonó no solo en el desfile, sino en los corazones de los cucuteños que vibraron con cada tonalidad.
Con ese entusiasmo y sentimiento, salieron marchando 1.700 niños, niñas, adolescentes y jóvenes de 31 bandas marciales de Cúcuta, las cuales conmemoraron el Día Municipal de las Bandas de Paz.
A las 4:15 de la tarde, comenzó el redoble de las cajas para marcar el inicio de la actividad, organizada por la Secretaría de Cultura y Patrimonio de la Alcaldía de Cúcuta. Desde el monumento Cristo Rey y hasta el parque Santander fue el recorrido que tomó con alegría la calle 18, toda la avenida 5 y hasta la calle 11.
Las risas, la pasión y el entusiasmo de los participantes contagiaron a todos los presentes, los cuales maravillados los acompañaron con aplausos y empatía.
El secretario de Cultura municipal, Nadim Bayona, explicó que el encuentro se hizo en articulación con las instituciones educativas, y las organizaciones culturales y comunitarias de la ciudad. Además, detalló que este día quedó instaurado mediante Acuerdo Municipal número 018 de 2024.
“En esta jornada participan 31 bandas de paz, provenientes de instituciones educativas oficiales, organizaciones sociales y culturales, procesos comunales y agrupaciones privadas. Estas bandas están conformadas por 1.700 niños, niñas, adolescentes y jóvenes que hacen parte activa de procesos de formación artística y musical en la ciudad”, manifestó el secretario.
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Bayona expuso que esta conmemoración lleva como finalidad reconocer y visibilizar el trabajo de formadores, docentes y gestores culturales, así como resaltar el papel fundamental que cumple el arte en la construcción de ciudadanía y paz. Además, buscamos mostrar a la comunidad cucuteña cómo estos procesos permiten que cientos de jóvenes aprovechen su tiempo libre de manera positiva, desarrollando habilidades artísticas en contextos educativos y culturales.
Entre los participantes se encontraba Sofía Rodríguez, estudiante del colegio San José de Cúcuta e integrante de la banda de la misma institución educativa, quien toca la timba y para quien este tipo de encuentro significa los frutos del esfuerzo de cada ensayo.
“Cuando salimos a estas presentaciones podemos mostrar todo lo que ensayamos semanalmente, y las personas pueden apreciar los talentos que tenemos todos los jóvenes y las ganas que le ponemos”, dijo.
Por su parte, la rectora de la banda del Instituto Técnico Jorge Gaitán Durán, Yulieth Villabona, explicó que ellos desde la zona rural de Cúcuta están impartiendo la música por medio de la banda, desde hace 16 años; sin embargo, el año pasado retomaron con más fuerza el proceso de enseñanza, el cual es vital para la auspiciar una formación integral.
“La banda está conformada por 70 niños y con ellos buscamos crear disciplinas, buenos hábitos y responsabilidad que les sirva para su vida adulta y sean unos profesionales aptos para trabajar en equipo y con una formación íntegra”, precisó.
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Mientras que Deiby Padilla Leal, instructor musical de la banda del colegio San José de Cúcuta, manifestó que desde la rectora de la institución, Claudia Torres Gamboa, hasta los padres de familia existe un compromiso con el proceso de enseñanza de los 50 jóvenes que hacen parte de la banda marcial de paz de este plantel educativo, donde se busca fomentar el arte y la cultura, a través de los talentos, la disciplina, la ética, el compromiso y la responsabilidad en los chicos.
“En las bandas marciales de paz movemos expresiones, con esos compases que sacuden los corazones de los muchachos y eso buscamos mover el alma para que amen lo que hacen, quieran la música y encuentren la esencia viva en nuestras tradiciones”, enfatizó Padilla.
Al finalizar el recorrido, en el parque Santander la presidenta del Concejo de Cúcuta, Carime Rodríguez, y representantes culturales entregaron un reconocimiento a cada una de las bandas marciales de paz que participaron en el emotivo encuentro que dignifica el esfuerzo que hacen los jóvenes al interpretar cada uno de sus instrumentos.
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