Es una cuestión irrefutable la difícil situación económica y social que vive nuestro municipio y los diferentes entes territoriales fronterizos con Venezuela. Mientras continúe en el poder el régimen de Maduro y su perverso sistema económico –antiliberal- no será fácil lograr calidad de vida y condiciones óptimas de empleabilidad para los habitantes de estas zonas de frontera.
Altos niveles de desempleo, informalidad desbordada, aparato productivo débil, migración, inseguridad etc. Estos problemas no se pueden abordar con paños de agua tibia por eso es importante contar con herramientas no solo financieras sino también normativas que permitan construir regímenes especiales y políticas públicas transitorias para poder contrarrestar los efectos adversos de la situación que viven los municipios fronterizos.
En ese entendido es importante mencionar lo que establece la Ley 1955 de 2019 –Plan de Desarrollo del gobierno Nacional- donde se perfila una norma de gran proyección para incentivar la productividad, la creación de nuevas empresas, la consolidación y protección de las existentes, la generación de empleo formal, la atracción de inversión nacional y extranjera, etc. Esta se refiere a la zona económica y social especial (ZESE) para la Guajira, Norte de Santander y Arauca.
Estos departamentos a partir de la vigencia de dicha Ley cuentan con un régimen tributario especialque permitiría –junto a otras acciones complementarias- la posibilidad de mejorar su prospectiva económica y social. En efecto, se establece que este régimen tributario aplica para las sociedades comerciales que se constituyan en las ZESE dentro de los tres años siguientes a la entrada en vigencia de la Ley 1955 de 2019; o para las sociedades comerciales existentesque durante ese mismo término se acojan a este régimen especial y demuestren un aumento del 15% del empleo directo generado, tomando como base el promedio de los trabajadores vinculados durante los dos últimos años.
Así, para estas sociedades comerciales –beneficiarias de las ZESE- se contempla una tarifa especial de impuesto sobre la renta del 0% durante los primeros cinco años contados a partir de la constitución de la sociedad, y del 50% de la tarifa general para los siguientes cinco años.
Como se puede observar esta norma si genera un incentivo atractivo para las nuevas inversiones y para proteger las ya existentes que podría comenzar a impactar de manera clara en la crisis económica que vive la ZESE para los próximos 10 años. Estas son medidas que no van a generar milagros inmediatos pero al menos en el corto plazo permite laconsolidación de acciones que desde hace más de cinco años estas zonas de frontera habían esperado.
Creo también relevante revisar aspectos pertinentes para crear un régimen laboral especial en las ZESE para complementar más las anteriores medidas en lo que respecta a lageneración de empleo y disminución de la informalidad. Es decir, debemos dar el debate en todos los escenarios para que se analice la conveniencia de establecer una flexibilización transitoria en lo que respecta a salarios y prestaciones sociales en la nómina que tienen que asumir las empresas sin que ello implique vulnerar los derechos laborales de los trabajadores.
¿Por qué no revisar la posibilidad de establecer un salario mínimo diferenciado de acuerdo a la realidad social y económica que viven los municipios de la ZESE?, ¿es conveniente seguir con un régimen laboral igual al de los demás municipios de Colombia sin considerar las condiciones adversas que tienen las entidades territoriales dentro de la ZESE?
El debate debe darse y sobre todo con las centrales de trabajadores, la academia, los gremios económicos, sociales y políticos. Todo ello aunado a mayor inversión, consolidación de la Ley de regiones, el apoyo a fondos permanentes de inversión en la ZESE, financiación especial de proyectos de gran envergadura por parte del gobierno nacional como sería un nuevo sistema de transporte masivo; esto podría generar condiciones relevantes para mejorar la situación de los municipios fronterizos en los próximos diez años.